Cuando falta menos de un mes para que finalice el plazo que se dieron las partes el pasado julio para intentar llegar a un acuerdo sobre los 30 puntos que provocaron la convocatoria de la huelga indefinida de recogida y limpieza, y tras cuatro reuniones, no ha habido avances significativos.
De hecho, en la de ayer los representantes de la empresa rechazaron de plano uno de los puntos planteados por los representantes de los trabajadores, consistente en la creación de una comisión que analice técnicamente la correcta aplicación de los nuevos sistemas de trabajo que se vayan a introducir en la empresa, así como las nuevas rutas a realizar.
Los representantes sindicales consideran que buena parte de la problemática generada en el área de recogida y limpieza se produce precisamente por la aplicación errónea de nuevas rutas y sistemas de trabajo, que provocan en muchas ocasiones que su ejecución sea deficiente por parte de los operarios, lo que provoca, como consecuencia de todo lo anterior, que los trabajadores puedan ser sancionados por no cumplir correctamente los objetivos o las indicaciones sin saber si técnicamente son correctas.
Los representantes de la empresa rechazaron la creación de esta comisión alegando que confían plenamente en los técnicos de la empresa, que son los encargados de diseñar, decidir y aplicar los nuevos sistemas de trabajo, itinerarios y rutas.
