Los bomberos de Palma han intervenido entre enero del presente año y el pasado 31 de agosto en 1.073 siniestros, de los cuales 886 han sido incendios y 405 operaciones de auxilio por accidentes de tráfico, afianzamiento y prevención de caída de objetos en la vía pública, derrumbes, salvamentos y presencia de colmenas. Las cifras, dadas a conocer ayer por el alcalde, Mateo Isern, en el acto de toma de posesión de ocho nuevos cabos del cuerpo, suponen una disminución de 40 incendios en relación a los primeros ocho meses del año pasado y un incremento del 10,9 por ciento por lo que respecta al número de auxilios. Isern destacó que el Cuerpo atiende una media de 4 siniestros al día, "lo que pone en evidencia la verdadera dimensión de los Bomberos de Palma y la importancia real de todos y cada uno de sus profesionales". Para el alcalde el trabajo de los bomberos también "es clave para mejorar los índices de seguridad de Palma como destino turístico", que se ha manifestado en los esfuerzos que se llevan a cabo a la hora de informar de las medidas contra incendios a los establecimientos