Mientras el miércoles el teniente de alcalde de Hacienda y portavoz municipal, Julio Martínez, no quería hacer "futuribles" sobre qué va a pasar con las prestaciones sociales que actualmente gestiona el Ayuntamiento de Palma si el Govern balear no recibe dinero de Madrid para su financiación, ayer ante el pleno del Ayuntamiento, afirmó que, en este supuesto, la administración municipal continuará prestándolos a partir del 1 de enero de 2016, "pero pasaremos la factura al Govern", aseguró. Según el teniente de alcalde "al Ayuntamiento ahora no le conviene que el Govern, por decreto, dé las competencias de Servicios Sociales al Ayuntamiento puesto que no estaría garantizada su financiación.

Insistió en que si el Govern no asume las competencias, seguirá prestando los servicios el Ayuntamiento como hasta ahora con la diferencia de que la Administración municipal podrá, en aplicación de la ley de estabilidad presupuestaria, reclamar su coste a la Administración autonómica o, en su caso, al Gobierno central.