La Fundació Natzaret celebró ayer su mercadillo solidario, una iniciativa que todos los años organiza con el objetivo de "buscar vías de financiación alternativas para continuar con la labor de dar apoyo educativo y emocional a los niños y jóvenes tanto acogidos como que se benefician de alguno de sus programas". En el mercadillo de ayer, que se celebró en la sede de Natzaret, en El Terreno, se vendieron centenares de objetos de segunda mano, como por ejemplo libros, ropa, CD, vinilos e incluso muebles.