Los representantes sindicales del área de Medio Ambiente de Emaya más representativos exigen que la dirección de la empresa sancione a su gerente, Pedro Campaner, tras haber sido condenado judicialmente por haber cometido una falta de injurias hacia Luis Ruiz García un exjefe de taller de la compañía despedido.

Por su parte, los grupos municipales de la oposición exigen también la adopción de medidas por parte de la presidencia de la empresa. En concreto, el concejal socialista Andreu Alcover, que es también consejero de Emaya calificó de "muy grave una condena de estas características al gerente que, entre otras funciones, ejerce la de jefe de personal". A juicio de Alcover, "la empresa está obligada a adoptar medidas tras conocer estas sentencia". Para los socialistas "este caso es la guinda al pastel de la mala gestión de personal llevada a cabo por la dirección de Emaya, una gestión que ha despertado críticas unánimes de trabajadores, oposición y, por diferentes motivos, también interna en las filas populares".

El concejal socialista recuerda que "estuvimos dos años pidiendo que se nombrara un gerente en Emaya dada la incapacidad del presidente de la empresa, el teniente de alcalde Andreu Garau, para gestionarla, pero lo que queda claro es que si el mismo que eligió a Garau también eligió al gerente, el resultado no tiene por qué ser diferente".

Por su parte, Neus Truyol, concejala del grupo municipal Més y también miembro del consejo de administración de Emaya, solicitó el pasado lunes que la condena del gerente sea tratada en la próxima reunión de este órgano. Para Truyol, la sentencia judicial demuestra que "el gerente de la empresa pública municipal no tiene capacidad de gestión de los conflictos laborales, además de evidenciar que no tiene una actitud de respeto hacia las personas que están a su cargo". Para Truyol, Emaya "debe nombrar a gerentes con actitud de diálogo y que potencien un buen clima laboral, con el fin de garantizar un servicio de calidad". Además, a su juicio, "las empresas públicas deben ser ejemplo de gestión económica, pero también humana".

Por su parte, fuentes de la empresa aseguraron que, de momento, y a la espera de que la sentencia sea firme, no se plantea la adopción de ninguna medida adicional ya que la resolución judicial ha sido recurrida por el condenado. A la espera de un pronunciamiento al respecto por parte del comité de empresa del área de Medio Ambiente que probablemente se producirá la próxima semana, Antoni Marín, del sindicato USO manifestó que al empresa debe adoptar medidas "ejemplares" contra el gerente "en aplicación del código ético que aprobó esta dirección de forma unilateral y que se está aplicando, con sanciones de suspensión de empleo y sueldo incluidas, a la plantilla". En este sentido recordó que "el gerente no es un simple empleado de Emaya, de ahí la extrema gravedad de la condena y la necesidad de que las medidas que se adopten sean contundentes y ejemplares"

En la misma línea se pronunció José Novo, del sindicato UGT, quien manifestó que "el gerente debe ser sancionado de forma más contundente que la que se impone a cualquier empleado con menor responsabilidad". Al igual que Marín, considera que Campaner, al margen de la sentencia judicial y teniendo en cuenta los hechos probados, "debe recibir un correctivo ejemplarizante, porque este señor tiene mucha responsabilidad en la empresa".

Para Antoni Jaume, del CSIF, "la condena no debe circunscribirse únicamente al ámbito de la jurisdicción penal, teniendo en cuenta la máxima responsabilidad que tiene este señor en la empresa". A su juicio, la actual dirección "no puede escurrir el bulto". Consideró que ni siquiera es preciso abrirle un expediente disciplinario, puesto que su conducta entra claramente en contradicción con el código ético de la empresa, aprobado de forma unilateral por la actual dirección. Recordó asimismo que hay empleados sancionados con días de suspensión de empleo y sueldo "por haber insultado a un compañero por la emisora, y lo que hizo el gerente es mucho más grave". En la misma línea se pronunció Francisco Sánchez, representante del sindicato USTE en la empresa.