Cuando el Mallorca Tenis Club disfrutaba de su época de mayor esplendor, en la década de los 60, tenía más de un millar de socios. En los últimos años quedaban solo un centenar, aunque varios de ellos también conocieron la primera etapa, la de un club de tenis elitista nacido en 1924 en los terrenos de Son Alegre -entre las actuales calles de Joan Miró y Federico García Lorca- que era frecuentado por la burguesía y la aristocracia palmesana. Algunos de aquellos aficionados acaban de estrenar otra etapa, esta vez en la urbanización sa Teulera, entre ellos jugadores habituales como Venancio Alemany, Guillermo Malberti, Fernando Pinya o el dueño del Auditorium, Rafael Ferragut, quien comenzó "en Son Alegre con 16 años y cuatro después se inauguró el Mallorca Tenis Club de Son Armadans", tal como recuerda.
El final de la concesión de las citadas instalaciones deportivas, situadas en el solar municipal de Can Baró, ha provocado que la mayoría de los usuarios se haya trasladado a las pistas recién abiertas por el expresidente del club creado hace 90 años, Tomás Salom. Los socios tendrán que decidir en breve si la entidad continúa o se disuelve, aunque ya le ha cogido el relevo el nuevo Mallorca Tenis Club Teulera.
Cuatro pistas de tenis
Se trata de un espacio de más de 6.000 metros cuadrados -en Son Armadans hay unos 12.000- con cuatro pistas de tenis y otras dos de minitenis, situado en la calle Teulera y abierto hace un mes tras poder utilizar las antiguas instalaciones "hasta el último momento gracias a los actuales concesionarios", destaca Salom en referencia a la propiedad del hotel Portixol.
Esta fue la única empresa que se presentó al concurso público convocado por el Ayuntamiento el año pasado para gestionar el recinto situado en la calle Mestres d´Aixa y que está declarado Bien Catalogado por su importante valor arquitectónico. La actual concesión rehabilitará y reabrirá las históricas instalaciones con otro nombre. El proyecto básico ya ha recibido el visto bueno de la comisión de Patrimonio del Consell de Mallorca y ahora los responsables están a la espera de que el Ayuntamiento apruebe el proyecto de ejecución con el fin de reformar el equipamiento del arquitecto Francesc Mitjans, uno de los pocos ejemplos del estilo racionalista en Ciutat.
La explotación del Mallorca Tenis Club finalizó en 2009 tras 49 años de concesión, aunque el anterior equipo de gobierno de Cort le prorrogó la gestión de las cinco pistas de Son Armadans hasta que fuese convocado otro concurso público. Finalmente se realizó esta legislatura y, pese a que el club quería presentarse, no lo hizo "por motivos económicos, debido a que es una entidad sin ánimo de lucro y no salían las cuentas", explica Salom.
Por este motivo, comenzó a buscar una ubicación en la que construir nuevas pistas de tenis, ya que no hay equipamientos de este tipo en todo el entorno. El presidente de Mallorca Tenis Club Teulera encontró el solar adecuado muy cerca del recinto Pins Pádel, con quien comparte vestuario y otros servicios.
El aficionado Rafael Ferragut califica de "estupendas" las pistas de tenis, aunque lamenta el final de la época dorada del club. Cree que "las concesiones provocan que, durante los últimos años, los gestores no realicen mejoras y desatiendan su cometido".
