Los alumnos de dieciséis colegios de Mallorca han aprendido en los últimos meses a ser emprendedores y trabajar en equipo para crear sus propias empresas. La iniciativa forma parte de un programa financiado por el Govern, en el que este año han participado 863 estudiantes de 3 a 16 años. Una representación de los alumnos acudió ayer al Ayuntamiento de Palma y, en la sala de plenos de la institución, recibieron de manos del alcalde Mateo Isern un permiso simbólico para que puedan vender los productos que manufacturen en un mercadillo de emprendedores que tendrá lugar el 14 de mayo en la plaza Major.

Los alumnos participantes cursan desde Educación Infantil hasta Secundaria, pero la actividad se ha adaptado en función de su edad. Los más pequeños han creado una sociedad limitada y han aprendido a constituir la empresa e iniciar la producción y venta. Los de Primaria han diseñado cooperativas, mientras que los de Secundaria debían formar organizaciones no gubernamentales. Una parte del dinero que consigan en el mercadillo del próximo mayo se destinará a ONG, mientras que el resto se destinará a actividades conjuntas (como financiar su viaje de estudios).

Los jóvenes del colegio Pius XII crearán pulseras de hilo y ayer le regalaron una al alcalde. En Sant Francesc fabricarán entre todos productos con materiales reciclados. Otros centros educativos han reconvertido cáscaras de coco en velas decorativas o diseñarán figuras de plastilina, broches o collares. Una escuela de Marratxí hará honor a su tierra y modelará figuras de barro. El instituto de Llucmajor ofrecerá manicuras a cambio de dinero. El alcalde Isern destacó que, más allá del servicio que ofrezcan, deben primar los valores de la solidaridad y el trabajo en grupo: "Os serán muy útiles cuando seáis mayores".