El ayuntamiento de Palma colocará en otro lugar los nuevos edificios que permite construir el Plan General con el fin de que no tapen ni dividan en dos el bosque de Can Tàpera.
El teniente de alcalde de Urbanismo de Cort, Jesús Valls, manifestó ayer que el equipo de gobierno ha decidido impulsar una modificación del planeamiento urbanístico que afecta a esta urbanización promovida por una empresa de Vicente Grande con el fin de mantener los metros cuadrados que se permite edificar en estos momentos, aunque cambiando la ubicación de los edificios. La intención de Cort es que éstos se localicen en la parte más baja y próxima al núcleo urbano de Cala Major con el fin de mantener en lo posible intacta la zona boscosa.
La urbanización promovida por Dracplus afecta a una superficie de 42.533 metros cuadrados de Sant Agustí. Se pretende la creación de un vial que separaría también la zona boscosa de Can Tàpera además de la dotación de servicios urbanos con el fin de permitir un incremento de población al construir 207 viviendas plurifamiliares para 621 personas.
Tal como está organizada en la actualidad la actuación los nuevos edificios se situarían a lo largo de una franja alargada enmedio de una gran zona verde privada que ahora forma parte de la zona boscosa de Can Tàpera; ésta no pertenece a la antigua propiedad de Sa Nostra.
El Plan Especial de Reforma Interior (PERI) de Cala Major y Sant Agustí ya preveía atravesar esta zona boscosa con un gran vial, cuya ejecución fue paralizada gracias a la movilización social aglutinada en torno a la plataforma Salvem Can Tàpera, en la que se integraban, entre otras entidades, el GOB.
En 2008 el Comité de Evaluaciones de Impacto Ambiental dependiente del Govern informó en contra y el PERI fue paralizado en diciembre del mismo año y suspendido el otorgamiento de licencias por un período de dos años. En 2009 el pleno del ayuntamiento de Palma instó a modificar el PERI de Cala Major y Sant Agustí, aprobado inicialmente en 2004, con el fin de proteger en lo posible la zona boscosa. Según Valls, con la propuesta de reubicación de la edificabilidad que va a formular el equipo de gobierno se da cumplimiento a este acuerdo plenario.
El teniente de alcalde es consciente de que, con esta propuesta, el promotor puede solicitar ser indemnizado por el denominado coeficiente de situación. Una situación que, según Valls, va a ser "perfectamente asumible para las arcas municipales", aunque no se atrevió a cuantificar la cantidad que podría ser desembolsada por Cort.
En relación a la otra gran parcela que ocupa el bosque, y que ocupa una superficie de más de 51.000 metros cuadrados cuya propiedad es de Sa Nostra, se prevé también el mantenimiento del uso previsto en el PERI como sistema general de equipamiento, y se concentra la edificabilidad en las inmediaciones de las actuales instalaciones. El resto del solar queda como espacio libre público. El grupo ecologista GOB alertó el pasado mes de septiembre sobre la posibilidad de que Dracplus ejecutara el proyecto de urbanización.
Entre las consideraciones del proyecto se indicaba que además de ser una zona densamente boscosa "tiene unas fuertes pendientes que hacen que los terrenos resulten inedificables sin que se provoque un grave impacto como consecuencia de los movimientos de tierra y de los muros de contención que serán necesarios para garantizar la estabilidad de los taludes".
