El concurso oposición para la plaza de mayor rango de la Policía Local de Palma ha quedado en suspenso. Así lo anunció ayer el alcalde Mateo Isern en su decálogo de medidas como respuesta al presunto caso de corrupción que investigan la Fiscalía y la Guardia Civil sobre el amaño de exámenes.

Según Isern, la decisión de paralizar el proceso selectivo de intendente no se debe a una decisión política, sino a que los técnicos municipales han "estimado parcialmente" dos recursos que se habían interpuesto contra las oposiciones. De esa manera, Cort revisará "a fondo" las bases de la convocatoria, según dijo Isern, y luego decidirá si reanudan la prueba o la cancelan y la convocan desde cero.

Sobre la oposición presuntamente amañada mediante la que ascendieron catorce oficiales, el alcalde dijo que "ya son firmes", así que "las actuaciones judiciales determinarán qué hará la administración municipal". "Si se confirma [el amaño], se anulará la parte manipulada y se volverán a repetir las pruebas", sentenció el alcalde.

Por último, Isern manifestó que se creará una comisión especial de la que formarán parte el ayuntamiento de Palma y el Govern balear que revisará todos los procesos de selección de personal de la Policía Local de la presente legislatura (de mediados de 2011 hasta ahora). "Se presupone la legitimidad de todas esas convocatorias. No obstante, ante la alarma pública creada y en defensa de la transparencia, se revisará todo".

En cuanto a la oposición para fichar a 35 agentes de base que está en vigor, en la que dos miembros del tribunal son policías imputados, Isern no tomó todavía decisión alguna.