­Las ciclocalles que implantó el equipo de gobierno de Mateo Isern tras eliminar el carril-bici de las Avenidas han provocado la pérdida de ciclistas urbanos en estos dos años de cambio. Desde 2011 hasta ahora, una media de 168 personas que utilizaban la bicicleta para desplazarse por esta zona ha dejado de usarla, tal como se desprende de los datos aportados por Cort.

Si se comparan los ciclistas que circulaban por las Avenidas con los que ahora pedalean por las vías alternativas, antes había una media de 996 usuarios y ahora se contabiliza una media de 828, según los controles que se llevaron a cabo en tres días de enero, febrero, marzo, abril y mayo en las calles Enric Alzamora y Font i Monteros, tanto hacia el mar como hacia los institutos, unas mediciones realizadas por el área de Movilidad de Cort.

Sin embargo, el responsable político, Gabriel Vallejo, ve como dato positivo que cada día pasan más usuarios por las conocidas como ciclocalles, debido a que esta cifra se ha incrementado un 10% este año respecto al mismo periodo del año anterior. En julio la comparativa fue de un 6,7% de aumento.

Cuando existía el carril-bici de las Avenidas -implantado en la pasada legislatura y eliminado a principios de este mandato-, su uso se triplicó en un solo año (de 2010 a 2011) y fue utilizado por más de 1.300 ciclistas diarios, tal como indicaron en su momento desde Movilidad.

Por dicha acogida y el menor éxito de las ciclocalles, el grupo municipal del PSOE ha vuelto a reclamar al equipo de gobierno de Isern que habilite ese carril. "La credibilidad sobre la movilidad pasa por recuperar el carril-bici de las Avenidas?, destacan.