­El ayuntamiento de Palma habilitará como experiencia piloto varios tramos de costa como zonas de baño para perros.

Se trata de una reivindicación reiterada en varias ocasiones por entidades animalistas y por el grupo municipal del PSM-IV-ExM, quien ayer presentó una moción en el pleno en la que se instaba al equipo de gobierno a cumplir con el acuerdo plenario del 22 de diciembre del 2011.

En él la concejala de Salud, Rosa Llobera, se comprometía a desarrollar el artículo 60 de la ordenanza municipal para la inserción de los animales de compañía en la sociedad urbana, con el fin de que sea posible la libre circulación de los perros en las playas de término municipal de Palma.

Según Llobera, la propuesta aceptada ayer consiste en una experiencia piloto según la cual se permitirá en baño y la libre circulación de los perros en varios puntos del litoral situados entre la playa de Ciudad Jardín y Cala Estancia, ambas excluidas.

En concreto, los perros podrán bañarse en el tramo de playa comprendido entre el Peñón, Cala Gamba, Cala Pudent, a lo largo de es Carnatge, y en el denominado Clot den Bernadet hasta el Puro Beach.

Llobera apeló a la responsabilidad de los propietarios de las mascotas para que esta experiencia piloto sea un éxito y pueda tener continuidad. En concreto, instó a la retirada de los excrementos y a que eviten en lo posible las peleas entre las mascotas, además de las posibles molestias a los usuarios de las zonas de baño. La actual normativa municipal prohíbe, con carácter general, la presencia de perros en las playas, aunque en invierno pueden pasear por ellas siempre que las mascotas vayan con correa. La prohibición sigue en vigor en todas las playas del término municipal y zonas costeras, excepto en las señaladas anteriormente.

Desde el grupo municipal del PSM-IV-ExM celebraron ayer que el equipo de gobierno haya aceptado su propuesta y normalice el acceso a algunas zonas de baño en la ciudad.

La concejala econacionalista Marisol Fernández se congratuló de que la moción presentada en el pleno de ayer, con el fin de dar cumplimiento a uno de los puntos incluidos en la ordenanza municipal de animales de compañía, se materializara en parte, aunque sea con la aprobación de una experiencia piloto de una duración de un año.

Fernández, si bien celebró que el equipo de gobierno haya aplicado el acuerdo plenario de hace un año, confía en que "realmente se lleven a cabo los compromisos adquiridos". Tanto la concejala econacionalista como la responsable del departamento de Salud, Rosa Llobera, pusieron en valor el trabajo y la colaboración de las entidades animalistas.