Hay quien se sorprende de ver al alcalde, Mateo Isern, al volante de su Jaguar por las calles de la ciudad. En parte no es extraño puesto que las personas que no le conocían antes de que se presentara a las elecciones como candidato del PP a la alcaldía se imaginaban que era una persona amante de la bicicleta, tal como manifestó en más de una ocasión en campaña electoral. Ya siendo alcalde, renunció al coche oficial y asiste a los actos públicos en calidad de primera autoridad municipal en un monovolumen, que comparte con los agentes de su escolta. Algo que, por cierto, no ha hecho ningún político de su entorno que tanto gusta de hablar de austeridad...para los demás.

Tres presupuestos en menos de un año

El teniente de alcalde de Hacienda, Julio Martínez, no quiere ni oír hablar de paralizar la tramitación de los presupuestos municipales con el fin de incorporar nuevas partidas relacionadas con la refinanciación de la deuda municipal. Entre otras consideraciones, afirma que los funcionarios de su concejalía no pueden asumir la carga de trabajo que supondría la paralización y la posterior prórroga de las cuentas actuales para unos meses y redactar una nueva propuesta para aprobarla definitivamente en mayo o junio. Hay que tener en cuenta que este año ya prorrogaron los actuales y redactaron los que están en vigor y que fueron aprobados en marzo.

Se abre una nueva batalla para conseguir más recursos

La posibilidad de refinanciar deuda y, en consecuencia, de disponer de más dinero para gastar -no de más ingresos- abre una nueva batalla entre los concejales del equipo de gobierno para conseguir más recursos para sus departamentos.