El bar previsto en el antiguo fortín de San Carlos, en el Dique del Oeste, podrá ser gestionado durante diez años, y no solo tres, tal como se planteó en el primer concurso público convocado por la Autoritat Portuària, que quedó desierto. Tras un acuerdo con el Ayuntamiento para ampliar esta concesión pública, el consejo de administración del organismo portuario aprobó las nuevas bases la semana pasada y ahora están pendientes de que salgan en el BOE para iniciar la licitación, tal como explicaron.
El futuro adjudicatario, si el concurso no queda desierto otra vez, podrá instalar una cafetería en una antigua batería militar del siglo XVIII, aunque además tendrá que ofrecer información turística a los cruceristas o pasajeros de los buques de líneas regulares, como Acciona, que desembarcan en el Dique del Oeste.
Es una de las condiciones que la Autoritat Portuària mantiene, ya que así lo acordó con el equipo de gobierno municipal con el fin de promocionar la ciudad entre los cruceristas.
