­El alcalde de Palma, Mateo Isern, pidió ayer disculpas a los representantes sindicales de los funcionarios municipales, retiró el borrador sobre la aplicación de la jornada laboral y el decreto autonómico que implica la supresión de complementos salariales, y se comprometió a negociar antes de adoptar una decisión definitiva.

Asimismo, la máxima autoridad municipal aseguró que va a intentar "minimizar" el impacto de los nuevos recortes incluidos tanto en los presupuestos generales del Estado como en el decreto autonómico, con el fin de que, en el caso de que se deban aplicar a los funcionarios municipales, repercutan lo menos posible en el salario.

La convocatoria urgente de la reunión con los representantes sindicales se produjo después de que el martes la teniente de alcalde de la Función Pública, Irene San Gil, junto con su equipo, entregara a los integrantes de la junta de personal un documento en el que se detallaban las consecuencias de la aplicación de la jornada general de 37,5 horas como mínimo en todo el sector público, tal como está contemplado en los presupuestos generales del Estado.

San Gil distribuyó entre los representantes sindicales otro documento en el que se contemplan las consecuencias de la aplicación del decreto autonómico de medidas urgentes en materia de personal con el fin de reducir el déficit público de la Comunitat Autònoma. Fuentes sindicales interpretan que los "recortes" salariales que implica la aplicación de ambos documentos puede alcanzar "un mínimo de 200 euros mensuales". En la reunión del martes, ambos documentos se presentaron "con un escaso margen de maniobra y negociación", según manifestó Pedro Castro, de CC OO.

La noticia corrió como un reguero de pólvora y provocó la "indignación y la preocupación" de todo el personal e incluso de los mandos de Policia y Bomberos, colectivos que serían los más perjudicados, puesto que en estos momentos la práctica totalidad de sud plantillas trabajan 40 horas semanales y reciben complementos de prolongación de jornada que, con la nueva normativa, podrían perder.

El portavoz del equipo de gobierno, Julio Martínez, explicó después del encuentro con los sindicatos que el alcalde trasmitió a los representantes de los trabajadores que la intención del Ayuntamiento "no era la de preocupar ni alarmar a ningún funcionario municipal, motivo por el cual les ha pedido disculpas". Asimismo, reiteró que uno de los objetivos del equipo de gobierno es el de "mantener un clima de confianza con los trabajadores y sus representantes".

También agradeció el trabajo que realizan los funcionarios, pese a las dificultades por las que está atravesando el Ayuntamiento, especialmente por la bajada de ingresos, hasta el punto de que, según el portavoz, el Alcalde ha pedido "ayuda a los sindicatos y funcionarios ya que son los que conocen mejor el Consistorio, con el fin de incrementar la eficiencia y reducir los gastos sin afectar al trabajo que realizan ni a la prestación del servicio que ofrecen".

Algunos sindicatos mantienen que el decreto autonómico no es de aplicación en Cort por lo que se ha encargado un informe a los servicios jurídicos, al tiempo que se ha acordado un calendario de reuniones para la negociación.