El concejal de Seguridad Ciudadana, Guillermo Navarro, ha señalado que los incumplimientos "más habituales" detectados por la Policía Local en la Playa de Palma "hacen referencia al botellón y a las concentraciones masivas de gente para beber alcohol".

Por ello, Navarro ha señalado que la nueva campaña de concienciación ciudadana y cumplimiento de las ordenanzas municipales en las playas presentada este jueves por Emaya, está orientada "a que los ciudadanos y turistas cumplan las ordenanzas municipales", y que "todos aquellos que no lo hagan podrán ser sancionados".

Dicha campaña consiste en la instalación de 29 carteles en diferentes puntos de alumbrado del paseo de la Playa de Palma donde se alerta sobre la prohibición de lanzar colillas y cristales, tener perros o practicar el botellón en la playa y que se extenderá a todas las playas del término municipal.

En este sentido, Navarro ha indicado que "se quiere incidir en el control de los incumplimientos de la normativa en las zonas de arena de las playas".

Por su parte, la concejala de Sanidad, Rosa Llobera ha explicado, en relación con la práctica del botellón, que se está trabajando "de forma global" entre muchas áreas del Ayuntamiento para "garantizar la convivencia y la salud pública". "Estamos utilizando los medios necesarios para erradicar estos actos incívicos", ha subrayado.

Asimismo, el teniente de alcalde de Medio Ambiente y presidente de la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya), Andreu Garau, ha explicado que esta campaña, realizada por personal propio de la empresa municipal, "tiene un componente transversal ya que también participan otras concejalías como Seguridad Ciudadana y Sanidad y Consumo".

Según ha indicado, esta iniciativa tiene como objetivo el "incentivar la concienciación social y medioambiental entre los ciudadanos y turistas de la zona de la Playa de Palma con el fin de conseguir que se cumplan las ordenanzas municipales y que se erradiquen los actos incívicos que acaban perjudicando y dañando nuestro mayor atractivo que es el turismo".

Así, Garau ha remarcado que esta campaña "está enfocada de una manera amable y positiva pero no por ello menos contundente ya que se advierte de que el incumplimiento de las ordenanzas puede implicar la máxima sanción que contemplan las ordenanzas municipales".

Al respecto, ha hecho hincapié en que estos actos "incívicos" suponen "un importantísimo desembolso económico para las arcas de la empresa", que se estima que alcanza el medio millón de euros. "Este dinero podrían servir para atender otras necesidades ciudadanas", ha sentenciado.