El Govern debe compensar económicamente a Cort porque los autobuses de la EMT tienen más usuarios que el metro y el tren. En la actualidad se han emitido 400.000 tarjetas ciudadanas frente a las 90.000 del Consorcio de Transportes de Mallorca (CTM). Además durante el año pasado emplearon el bus público más de 43 millones de usuarios, lo que ha supuesto un incremento de más de 900.000 usuarios respecto al 2009. Sin embargo, el metro tiene una media de un millón de pasajeros anuales.

El exconcejal de Movilidad en la legislatura pasada, José Hila, explica que con este sistema integrado el ayuntamiento dejaba de ingresar dinero porque aglutina a un mayor número de personas que lo emplean. No obstante, señala que tanto el Govern como Cort salían beneficiados con su puesta en marcha porque se preveía aumentar el número de beneficiarios. Los que poseen la tarjeta ciudadana no tenían que realizar ningún trámite adicional para poder usar este documento para viajar en metro y sucedía lo mismo en el caso de los pasajeros del transporte interurbano. Desde el primer momento de aplicación ambos tipos de tarjeta resultaron incompatibles por lo que los que emplean el metro y el tren tienen que pagar dos veces si quieren usar el bus de la EMT. Sucede lo mismo en el caso de los que poseen la tarjeta ciudadana. Los responsables de Movilidad de ambas administraciones en la anterior legislatura quisieron promover el uso del transporte público evitando realizar un pago doble por lo que sólo tendrían que abonar una única vez y no sería necesario disponer de ambos documentos de transporte público. En un principio sólo estaba prevista la compatibilidad entre bus y metro y el tren debía esperar a una posterior modificación.