La situación sociolaboral no es determinante para ser víctima o no de malos tratos en el hogar, pero influye. Esta es, al menos, una de las conclusiones que se desprende de los datos facilitados ayer por la concejalía de Igualdad, Derechos Cívicos y Educación, a 48 horas de la celebración, mañana domingo, de la tercera carrera popular contra la violencia de género, en la que el pasado día 17 ya se habían inscrito 1.130 personas.

Tal como explicó la concejala Cristina Ferrer, hasta el pasado mes de septiembre, el servicio de atención integral a las víctimas de violencia de género del Ayuntamiento atendió 129 personas, la inmensa mayoría mujeres. El año pasado las usuarias del servicio ascendieron a 191, un 35% más que el precendente.

Más de la mitad de estas mujeres, en concreto el 57%, están en el paro, tienen edades comprendidas entre los 25 y 39 años y seis de cada diez son españolas, tres estranjeras no comunitarias y una comunitaria.

A menudo se trata de mujeres que suman a su situación de victimas la indefensión económica y social, puesto que, además de no disponer de trabajo, un 27% tienen necesidad de un nuevo alojamiento y el 44% no cuenta con apoyo familiar. Asimismo, la mayor parte de las víctimas atendidas han padecido violencia física (el 81%) y/o psicológica (92%). Tan sólo el 79% de atendidas ha interpuesto denuncia.

Personas maltratadoras

El Ayuntamiento también ofrece un programa desde hace cuatro años para personas maltratadoras. En 2009 atendió a 54 personas y en los tres primeros trimestres de este año, 50.

El 44% de las personas atendidas por este servicio han sido denunciadas, el 27% consumen sustancias tóxicas y un 12% tienen antecedentes psiquiátricos. Una tercera parte se encuentran en el paro. Por lo que se refiere al tipo de violencia ejercida sobre su pareja, un 27% es psicológica, un 23% física y un 22% psíquica. En lo que llevamos de año el porcentaje de maltratadores atendidos que han ejercido violencia física se ha incrementado hasta llegar al 42% del total.

Otro de los programas municipales contra la violencia de género se dirige a los hijos e hijas de las víctimas. Se trata del proyecto Mentories que, entre el año pasado y los tres primeros trimestres de éste ha atendido 318 menores con edades comprendidas entre los 4 y 18 años. El programa, dirigido a hijos e hijas de víctimas de violencia de género en el ámbito familiar, tiene como objetivo ayudar a los menores a identificar modelos maternos y paternos positivos que permitan construir nuevas formas de relación, con el fin de evitar el ciclo repetitivo de la violencia.

Tal como recordaron la concejala y la coordinadora general del área, Elena Quintana, este programa también va dirigido a las familias y está gestionado por la Fundació Ires. En 2009 atendió 52 familias y este año hasta el pasado mes de septiembre, 19 más.