El presidente del Mallorca, Jaume Cladera, ha mostrado hoy su "sorpresa" por la decisión del Ayuntamiento de Palma de iniciar los trámites del derribo del estadio Lluís Sitjar, anunciada hoy por la alcaldesa Aina Calvo.

"Es una noticia inesperada y que nos ha sorprendido; tenemos una tercera parte del Lluís Sitjar y la Asociación de Copropietarios y su presidente es quien tiene la representatividad.Suponemos que habrá un plazo de alegaciones, pero no hemos recibido la notificación todavía", ha señalado Cladera, quién ha recordado que el Mallorca, hace solo unos pocos días, había acordado con el Ayuntamiento crear una comisión para hablar de estos temas.

Cladera ha afirmado que no discute la decisión tomada por el Ayuntamiento sobre el Luis Sitjar "ni las opciones de futuro que maneja, lo que sí nos parece poco respetuoso es que teniendo por lo visto la decisión ya tomada, la alcaldesa no fuera capaz de comentarnos nada en la reunión que mantuvimos hace ocho días".

Y ha añadido: "Fuimos a hablarle del proyecto, a presentarnos, no fuimos a pedir nada, propusimos hablar del futuro de Son Moix, del Lluís Sitjar, de la Ciudad Deportiva y quedamos en seguir hablando. No creemos que haya sido elegante el no habernos transmitido algo que estaba ya decidido".

El Ayuntamiento de Palma ha iniciado los trámites para demoler el estadio Lluís Sitjar debido al estado de ruina en que, según los técnicos de Cort, se encuentra esta infraestructura ubicada en un solar que el equipo de gobierno quiere convertir en equipamientos deportivos públicos y espacio verde.

Ahora se abre un plazo de diez días para las alegaciones de los copropietarios de un recinto de 60 años de antigüedad, actualmente en estado absoluto de abandono y que fue el principal y único estadio utilizado por el Mallorca hasta 1999, cuando el equipo se trasladó a Son Moix