Heterogéneas, incluso dispares, las mujeres que compartieron ayer mesa para diseccionar el Tejido social en femenino, en la charla que abrió la segunda jornada de la I Primera Trobada de Dones de les Illes Balears, compartieron rotundidad en un tema: la igualdad. "No debemos renunciar a la paridad jamás", expresó contundente Francisca Mas, del Lobby de Dones. Luchadora infatigable, comprueba, al igual que la mayoría de mujeres reunidas ayer en Flassaders, cómo se están "dando pasos atrás" en tiempos de recortes del estado de bienestar.

Se centraron en casos de Balears, cada una desde su experiencia vital, profesional, la mencionada Mas, junto a Lola Mir, de ALBA Menorca; Mariví Mengual, de Dones Progressistes d´Eivissa, y Sonia Cardona, de Espai Dones Formentera.

En Mallorca, hay que reconocer "la confusión" que produce la "institucionalización del tejido asociativo". Es un hecho "positivo", según Francisca Mas, pero que "nos ha desbordado".

Una "carencia" observada es "la falta de participación de mujeres jóvenes en organismos feministas porque están más interesadas en otras oenegés", subrayó la abogada Mas, muy preocupada, sobre todo, al comprobar cierta "en las aulas, cierta contaminación mutua de pautas de conducta machistas". A su juicio, "la convivencia con mujeres con falta de libertad está provocando contagios en las escuelas".

El "reto" , al menos en Palma, "es aunar trabajo y creatividad", un hecho que es más visible en los pueblos a la hora de encarar el "protagonismo social". Lo fundamental para Francisca Mas es "reconocernos entre nosotras, apoyarnos, intercambiar recursos". En la agenda de "mínimos", la "exigencia de la paridad en derechos humanos, en lo cultural y en educación sexual".

La isla más pequeña

Desde Formentera, el testimonio de Sonia Cardona, fue elocuente: "El divorcio en una isla tan pequeña enfrenta a dos familias que se conocen y donde es fácil que se hagan visibles las amenazas, el maltrato. Sin embargo, Formentera no tiene un lugar de atención para los casos de maltrato".

Cardona convino en la falta de "estudios sobre la memoria histórica de las mujeres". Con todo, en un territorio tan exiguo, "el tejido asociativo ya estaba ocupado por mujeres". De ahí, y así lo reconoció Cardona, "el poder desde la perspectiva de género se puede reconocer, pero hace falta estar juntas. Unidas podemos más que separadas". La sala se cerró en una ovación a sus palabras.

Desde Eivissa alcanzó el testimonio de Mariví Mengual, de Dones Progresistes d´Eivissa y regidora de Igualdad del Ayuntamiento pitiuso.

"En Evissa la composición demográfica se salda con un cincuenta por ciento de no nacidos en la isla. Las redes de cuidado fundamentales comportan precariedad porque al no tenerlas hacen que se necesite más implicación institucional en estos servicios".

Recordó cómo estos trabajos asistenciales gratuitos han recaído "en mujeres". El aumento del asociacionismo de mujeres en los últimos tres años se ha incrementado. Un dato revela la importancia: "En este primer encuentro de mujeres de las Balears, hemos venido 12 de Eivissa y 19, de Formentera".

Lola Mir trabaja desde ALBA Menorca en los casos de ayuda a mujeres que padecen cáncer de mama. Llevan diez años y cuentan con noventa socias afectadas. Mir aseguró que el trabajo asociativo "ha proliferado" en la últimas décadas, pero "faltan asociaciones femeninas".