No tiene título pero la raíz de su próximo libro está clara para su autora, Rosa Cobo: "Las mujeres estamos viviendo un momento de retroceso, pérdida de derechos, recursos. La pobreza se está feminizando y la supervivencia también".

La socióloga, que ayer habló de Feminismo, ciudadanía y derechos de las mujeres en el I Encuentro de Mujeres de las Balears, organizado por el Consell de Participació de les Dones y con apoyo del Govern y de Cort, entre otras entidades, no escatimó espíritu crítico "ante los efectos negativos de gobiernos neoliberales". Un proceso que, advierte, es global.

Entre las subidas de temperatura, es decir, los efectos de esa enfermedad que sacude un modelo de igualdad, "el aumento del trabajo gratuito sobre las mujeres" como consecuencia del recorte de las políticas de dependencia. Algo similar ocurre con los hijos. "El desplazamiento del Estado a la familia es el recorte, de un lado, y que éste se invisibilice". El segundo efecto negativo, según ha contrastado Rosa Cobo, es que "las mujeres están siendo lanzadas a un mundo laboral en condiciones precarias. Entramos en condiciones de proveedoras frustradas con salarios más bajos, por lo menos en un 27 por ciento".

Recorte

Otra secuela del febrazo es que "a las mujeres, se las ve como guardianas de la cultura, pero a la vez se les recortan derechos". A juicio de la autora de Fundamento del patriarcado moderno, Jean Jacques Rousseau, "las prácticas religiosas y culturales, en general, tienen dimensión patriarcal".

Ella no quiere despistarse y eludir mirar cerca. Recuerda cómo "en España han aumentado las reconstrucciones del himen", y cómo muchas mujeres están sometidas a ese canon de belleza "patriarcal" que pide una talla 38, con dietas que "te llevan a la anorexia" y que no son sino espejos de "políticas de control del cuerpo y su mutilación".

Contempla con pesar "el retroceso y la pérdida de hegemonía del feminismo", consecuencia de "nuevas formas de violencia patriarcal en la que surgen fenómenos nuevos como el feminicidio y las muertes o violaciones colectivas los fines de semana. Ésto no sucede aquí, pero sí se está imponiendo que muchas cenas de negocios, de despedidas de soltero, terminen en prostíbulos y con menores. Usan a las mujeres como una forma de ocio", recalca.

Cobo se muestra como el acero cuando constata que "el 25 por cien de las mujeres de la Unión Europea han sufrido abusos en su infancia; eso en la Europa del bienestar; o cuando en España se dan un millón de contactos sexuales al día". Concluye que "las mujeres tenemos que rearmarnos ideológicamente para organizar un movimiento feminista fuerte que recoja la herencia de tres siglos". En paralelo, habla de reforzar "a la izquierda".

"Concesión"

La reciente supresión del ministerio de Igualdad por parte del gobierno de Zapatero le parece "un grandísimo error". Cree que "ha sido una concesión a un sector conservador de la opinión pública".

"La crisis ha enturbiado las políticas sociales de Zapatero que en su primera legislatura hizo grandes leyes como la de violencia de género, la de Igualdad, la de matrimonios del mismo sexo y la de Dependencia. Sin embargo, en esta segunda legislatura, las mujeres no están en el centro de la política del Gobierno".

Rosa Cobo es feminista y militante "a favor de la igualdad". Considera que "sí pueden existir hombres feministas", pese a dominar "un modelo patriarcal que va a más".