Quienes acuden al cementerio de Palma por Tots Sants visitan una o varias sepulturas pertenecientes a familiares. Sin embargo, "más de un centenar de personas" también aprovechan su paseo ese día por el camposanto de Son Valentí para acercarse a la tumba de Peret. No es del cantante de rumba catalana, sino de un joven que falleció hace 17 años en un accidente de coche. Los empleados de la Funeraria le conocen como ´el niño del GSI´ por el modelo del vehículo que conducía. Su tumba tiene el honor de ser oficialmente "la más bonita del cementerio", según una placa que el Ayuntamiento entregó a su familia hace años.

Lo explicaba ayer un sobrino, también llamado Peret, que llegó sobre las siete de la mañana con dos hermanas del fallecido, Isabel y María Fernández, para adornar la reconocida sepultura. "Desde la primera vez nos hemos esmerado en que esté bien y llena de flores. Las artificiales las compramos en Barcelona, de diferentes colores cada año, y las naturales son de aquí", tal como detalla María. De blanco y rojo han formado los nombres de Peret, Rosa y Perico. Estos dos últimos son la madre y el padre. La mujer murió hace seis años y Perico, hace cinco meses. Las fotos de ´el Peret´, ´el Gorreta´ y ´la Chana´, que así los llamaban, están rodeadas de rosas, claveles y gladiolos. Las hermanas y otros familiares permanecieron allí todo el día, velando por sus muertos y recibiendo a parientes o curiosos, como Amelia Torres. Ella es uno de los muchos desconocidos que se acerca "todos los años, porque es digna de ver". Además, la tumba está muy próxima a la entrada del camí de la Ardiaca, por lo que la afluencia es aún mayor.

"Las familias gitanas tienen un gran respeto por sus fallecidos y este día de Tots Sants están muy implicados", dice un empleado de la Funeraria. De hecho, los nichos y sepulturas más floridos son los de esta etnia, como por ejemplo el panteón de los hijos de ´la Chata´ y ´el Nico´, según se puede leer en el frontispicio, y otros muchos.

20.000 personas

Entre flores y recuerdos pasearon unas 20.000 personas durante los tres días del puente de los Santos Difuntos, tal como afirmó ayer la alcaldesa, Aina Calvo, tras recorrer el cementerio acompañada por un grupo de concejales de Cort, tanto del PSOE como del PP. Comparó esta jornada festiva con la del año pasado y destacó que "la afluencia ha sido mucho más escalonada, por lo que no se han producido aglomeraciones".

De todos modos, el ambiente era muy animado. Mientras los políticos visitaban las sepulturas de los funcionarios municipales y los bomberos, la placa en honor a las víctimas de la libertad y la fosa común; numerosos palmesanos de todas las edades se acercaban a Son Valentí cargados con ramos de flores y muchas veces charlando sin tanta tristeza y recogimiento como se podría esperar. Había de todo, aunque el día de Tots Sants es principalmente una arraigada tradición que una vez al año llena de color los cementerios de Palma, Sant Jordi, Establiments, Génova y la Vileta.

Carpa informativa

La jornada de ayer también sirvió para que algunos se planteasen la renovación de las viejas lápidas de los familiares o la compra de una sepultura. "Hay mucho interés en adquirir una placa de recuerdo o un jarrón, aunque también me han preguntado por los precios de los nichos", explicaba la encargada de la carpa informativa instalada por primera vez en Son Valentí, justo después del puente de sa Riera que une la parte nueva del camposanto con la antigua. Otra pregunta que respondió a menudo es dónde se encuentra un determinado nicho o tumba. "Me dicen el nombre del familiar que buscan, yo llamo al Tanatorio para que lo encuentren informáticamente y después les muestro en un plano cómo se llega hasta allí", detalla.

Fue un día ajetreado alrededor del camí de Jesús y lleno de coches en los aparcamientos de Sa Riera, Son Moix, Carrefour, Decathlon, junto al Palma Arena e incluso en los arcenes y huecos de la rotonda y el inicio de la carretera de Puigpunyent, ya que están muy cerca del camposanto.

Como recordó la alcaldesa, ayer fue "un día para visitar a las personas que ya no se encuentran entre nosotros, pero se mantienen vivas en nuestra memoria".