La leyenda continúa. El pasadizo secreto del castillo de Bellver todavía no es una certeza, sino una hipótesis convertida en misterioso relato durante siglos. Pero se ha dado un paso más. Las excavaciones arqueológicas efectuadas por la empresa Elements han permitido un importante hallazgo: "Se han descubierto los primeros peldaños de una escalera de tramos, así como dos pasadizos en la roca: uno en dirección al centro del patio de armas del castillo y otro que circunvalaría las torres sur y oeste", como explica el arqueólogo Llorenç Vila. Este segundo túnel podría conducir a "un acceso que comunicaría el castillo con las cuevas del subsuelo". Ahí está la clave. La leyenda desde hace siglos y el libro del investigador Pere Galiana Les coves de Bellver apuntan que, cuando Jaume II ordenó construir la fortaleza, exigió diseñar "una vía de escape en caso de asalto al castillo", ya que tres décadas antes el rey tuvo que huir del palacio de Perpinyà a través del sistema de cloacas. Era el año 1278 y su hermano Pere III le perseguía tras una guerra narrada en la novela La Catedral del Mar. El rey de Mallorca no quería que le pudiese ocurrir lo mismo otra vez.

Volviendo al presente, el martes se inicia la segunda fase de las excavaciones para corroborar la hipótesis de Galiana. La primera fase se realizó en diciembre de 2009, financiada por el ayuntamiento de Palma, y consistió en la excavación de seis metros cuadrados de superficie y 2,4 metros de profundidad. Llorenç Vila y su socia, Noemi Prats, tuvieron gran éxito, porque en ese agujero encontraron, tras cavar manualmente, dos escalones y el pasadizo mencionado anteriormente. Para poder continuar, pidieron una subvención al Consell de Mallorca, que financia el 30 por ciento de la excavación. El resto del importe lo paga la empresa Elements. Más de 5.000 euros en total. A partir de ahora ampliarán el sondeo siguiendo la escalera hacia el subsuelo y los pasadizos, principalmente el que circunvalaría las torres sur y oeste.

A simple vista se pueden apreciar los dos peldaños y cómo la pared del muro hace un giro que –habrá que averiguarlo– conduciría hacia el foso. Durante las diez semanas que durará este segundo sondeo llegarán hasta el muro del castillo. Ahora la excavación se encuentra en el lateral de una sala de la planta baja del edificio.

Obras de electrificación

El interés por certificar la existencia de un pasadizo secreto surgió en 2007, tal como cuenta la conservadora del castillo de Bellver, Magdalena Rosselló. "Cuando se puso en marcha el proyecto de mejora de la electrificación del recinto, los obreros encontraron un habitáculo desconocido que estaba tapiado con un muro y, en la parte superior de esta galería, se apreciaba lo que parecían escalones vistos desde abajo", especifica.

Este descubrimiento, unido a la teoría del investigador y la leyenda, fue la espita que impulsó el proyecto arqueológico. La empresa especializada también ha sido la encargada de sacar a la luz los orígenes de las torres del Temple, situadas en el barrio de Sa Calatrava. Ahora están inmersos en el subsuelo de Bellver.

Vila y Prats han realizado además un alzamiento topográfico de la escalera y los pasadizos, y analizarán químicamente "diversas muestras de los peldaños para conocer su procedencia concreta. De esta manera se podrá saber si el material utilizado en la construcción de la escalera fue obtenido de las canteras existentes en las inmediaciones del castillo o si proceden de otras más alejadas, como por ejemplo las de Portals Vells o Santanyí".

En cambio, hasta ahora, no hay forma de averiguar la fecha de construcción de lo encontrado, por lo que sólo queda que los arqueólogos sigan excavando para saber dónde llega el pasadizo. Si la teoría se confirma, la construcción estratégica del rey Jaume II dejará de ser leyenda para convertirse en historia.