El ayuntamiento de Palma exige a los productores especializados en agricultura ecológica que quieran participar en el citado mercado que dispongan del certificado oficial emitido por el Consell Balear de Producció Agrària Ecològica. Esto significa que únicamente pueden comercializar el género que ellos mismos cultivan, crían, recogen, conservan o transforman. Dicha garantía está avalada por el reglamento del Consejo Europeo sobre producción y etiquetaje de los productos ecológicos europeos y sus posteriores modificaciones. En el mercado de la plaza de los patines sólo están permitidos los de origen agrario.
En cuanto a las características de los puestos de venta, deben ser paradas de cuatro metros lineales de fachada por dos de profundidad. Además, las instalaciones que los vendedores utilicen tienen que ofrecer "una adecuada imagen", de la que son responsables tanto ellos como el consistorio.
Deber de concurrencia
Entre los requisitos exigidos se destaca también que la docena de productores autorizados a ocupar un espacio público tienen el "deber de concurrencia en la parada", de nuevo con el objetivo de dar una buena imagen.
Y, por último, en cuanto a las condiciones higiénicas y sanitarias de los puestos, necesitan un informe de la Unidad Municipal Técnica de Salud.
