La teniente de alcalde de Relaciones Institucionales, Comercio y Consumo, Joana Maria Borràs, está convencida de "la buena voluntad" del Govern balear con la cuestión de las competencias municipales en materia de Consumo. No obstante, manifiesta que el problema reside en la no adecuación del estatuto balear de consumidores y usuarios a la Ley estatal. Una solución al problema planteado pasaría por adaptar esta norma a la del Estado, la que, a su vez, ya recoge la normativa europea. De esta forma, los 9 inspectores municipales podrían actuar en la ciudad sumando esfuerzos con los 11 agentes de consumo que tiene la Conselleria para toda Balears.