"Los torrentes de Palma son los más delicados de Mallorca, y han quedado muy tocados desde las últimas grandes lluvias de diciembre", aseguró ayer el conseller de Medio Ambient, Miguel Ángel Grimalt, durante su visita a las obras "de emergencia" en el torrente Gros, que comenzaron recientemente y finalizarán dentro de seis meses. La actuación incluye la reparación de los torrentes de Coanegra y de Barbarà, por una inversión total de 600.000 euros. Grimalt calificó las obras de "muy importantes" aunque reconoció que son puntuales y que hacen falta intervenciones "más contundentes" para "devolver la normalidad a los torrentes". También dijo que le "gustaría" que el convenio pendiente por 30 millones con el ministerio de Medio Ambiente para este y otros fines "se firmara dentro de dos o tres meses ya que se si se retrasa puede haber dificultades", pero reconoció que la llegada de los fondos aún está en el aire. "No hay certezas, aún no está la firma", dijo.