Javier Rodrigo de Santos, defendido por el abogado Bartolomé Vidal, señaló a principios de julio del 2006 que la Empresa Municipal de Obras y Proyectos Urbanos de Palma (EMOP), que él presidía, iba a invertir 1,5 millones de euros en dotar de más mobiliario urbano al Parc de Sa Riera. Esta partida parece ser que finalmente fue destinada a la construcción de la réplica en juegos infantiles del castillo de Bellver, que ahora investiga la fiscalía anticorrupción de Balears por supuesta prevaricación y otros posibles delitos.

El teniente de alcalde de Urbanismo dedicó uno de sus habituales contactos con la prensa a explicar las modificaciones en el proyecto inicial del Parc de Sa Riera, que iban a suponer un aumento de 10 millones de euros en el presupuesto inicial y un retraso de varios meses en la culminación del proyecto.