El momento más llamativo del acto de inauguración del Palma Aquarium tuvo lugar antes de los parlamentos de las autoridades, cuando se llevó a cabo una bendición tradicional hawaiana de las instalaciones, oficiada por el sacerdote conocido como Tío Charlie. Este tipo de rituales contribuyen a la comunión del ser humano "como parte de los océanos", según explicaron desde la compañía Coral World. Posteriormente, las autoridades descubrieron el mayor tanque de agua del acuario, que alberga a 20 tiburones.