El equipo de gobierno de Cort mantendrá la calificación actual como equipamiento deportivo al Lluís Sitjar y al club militar de es Fortí. El teniente de alcalde de Urbanismo y coordinador municipal, Rodrigo de Santos, rechazó la recalificación de ambos como espacio libre público y su reincorporación a la Cuña Verde.

En la reunión mantenida el pasado miércoles por la tarde incluida en las programadas con distintas entidades ciudadanas y grupos municipales de la oposición con el fin de intentar llegar al mayor consenso posible sobre las cuestiones urbanísticas que afectan a la ciudad, los grupos municipales del PSOE, PSM y la Federació d'Associacions de Veïns de Palma plantearon nuevamente la necesidad de incluir en la Cuña Verde los terrenos del antiguo estadio del Mallorca y de la zona militar de es Fortí.

Ambos terrenos formaban parte, en el Plan General de Ordenación Urbana aprobado en 1985, del futuro espacio libre público, aunque, en la revisión aprobada definitivamente en diciembre de 1998 y que entró en vigor en enero de 1999, se excluyeron, cercenando en casi un tercio la superficie de la primitiva Cuña Verde.

Tratamiento integrado

Si bien Rodrigo de Santos defendió el mantenimiento del uso deportivo actual, apuntó la posibilidad de negociar con los propietarios "un tratamiento integrado dentro del parque".

El teniente de alcalde advirtió, no obstante, que esta cuestión no se plantea en estos momentos como prioritaria, teniendo en cuenta que ya se está ejecutando la primera fase del futuro espacio libre público y que ésta no afecta a ninguno de los dos equipamientos.

No al uso residencial

Aunque no se abordara de forma directa en la reunión del pasado miércoles, quedó claro que el equipo de gobierno de Catalina Cirer no se plantea la posibilidad de que ni el Lluís Sitjar ni es Fortí puedan tener ni en su totalidad ni en parte un uso distinto al deportivo, como el residencial, como se ha propuesto extraoficialmente en varias ocasiones por parte de los propietarios del antiguo estadio del Real Mallorca.

Ello no supone necesariamente que deban mantenerse las actuales instalaciones. Sería en este contexto de posibles cambios en los que se plantearía por parte de Cort, mediente negociaciones con los propietarios, las fórmulas de integración de estos espacios en la Cuña Verde, aunque siempre manteniendo su uso deportivo.

Pese a que las obras de la primera fase de la Cuña Verde ya se están desarrollando desde el pasado mes de abril, Rodrigo de Santos asegura que aún hay margen para la negociación, puesto que hay aspectos del desarrollo del proyecto que no están completamente definidos, como el de la interconexión entre las barriadas situadas a uno y otro lado del cauce de sa Riera.