Récord turístico y sequía

Miguel Vicens

Miguel Vicens

Dos noticias que se entienden mejor juntas. Fitur anuncia un verano de récord en Mallorca y el Govern pide a los ayuntamientos de la isla que empiecen a ahorrar agua ante el previsible escenario de sequía en julio y agosto. Así que la escasez, que ya en pleno invierno mantiene al Pla de Mallorca y al municipio de Artà en situación de prealerta, habrá que compartirla agravada con nuestros queridos visitantes en verano.

Son las dos caras de un modelo turístico cuya voluntad de cambio será tan solo una aspiración mientras su rentabilidad precise de ocupaciones del 100%, saturación de las infraestructuras y agotamiento hasta la extenuación de los recursos naturales.

El debate enfrenta también a dos sectores del propio Govern, que esta semana se han contraprogramado sin pudor. El PSOE celebra los mensajes de euforia que llegan de la feria turística madrileña, donde ha vuelto a promocionar las islas como un mundo feliz, colgándose además la medalla de la firma del convenio de hostelería cuyo acuerdo ha propiciado. Y Més hace coincidir con la celebración de la cita y sus buenas perspectivas la advertencia de la inminente sequía a través de la conselleria de Medio Ambiente, sin esperar a otro momento en el que pueda anunciar medidas concretas. Y lo hace para poner su granito de arena en contra de la promoción turística, porque a la hora de la verdad hay 36 ayuntamientos que todavía no han presentado su plan de gestión sostenible del agua y porque en la reunión con los alcaldes para analizar el grave problema, el conseller de Medio Ambiente saluda y se va, cuando su mensaje de escasez ya está en las portadas y el Govern vuelve a sonar de nuevo como una orquesta desafinada.

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