Tribuna

«Mecanismo rural de garantia» aprobado por ley

Fernando Fernández Such

Fernando Fernández Such

Desde hace varios años, las organizaciones y entidades que trabajamos por un mundo rural vivo, venimos demandamos un «Mecanismo Rural de Garantía» o lo que se conoce en términos políticos y técnicos, como «Rural Proofing». Es un compromiso que adquieren los gobiernos para examinar las políticas públicas y asegurar que no perjudican a las áreas rurales. Se trata de obligar a las autoridades públicas a analizar el impacto positivo o negativo que cualquier ley tiene sobre el medio rural y que las leyes incorporen una corrección territorial positiva en este sentido. Contábamos con la experiencia implantada en países como Canadá, Inglaterra, Finlandia, Australia o Nueva Zelanda. Se trata de enfocar las políticas con «mirada rural».

La idea cuenta con el respaldo de Unión Europe. En el año 2016 el Comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan, destacó la conveniencia de adoptar mecanismos para armonizaran todas las leyes con una visión rural. En junio de 2021 la Comisión Europea aprobó su comunicación «Una visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE» donde se comprometía a la adopción de mecanismos para medir el impacto en el medio rural de todas las iniciativas legislativas de la UE y el pasado 13 de diciembre de 2022, el Parlamento Europeo aprobó su informe sobre esta misma comunicación, ampliando la propuesta a la creación de un «Observatorio Rural Europeo».

El Gobierno de España está dando pasos concretos. La Estrategia para el Reto Demográfico y su concreción en el Plan de 130 medidas lo incluían. El pasado 20 de diciembre se aprobó la Ley 27/2022 de institucionalización de la evaluación de políticas públicas en la Administración General del Estado. Esta ley, importante por muchas razones, incluye una disposición adicional sexta que establece la creación del «Mecanismo Rural de Garantía». El gobierno lo impulsará asegurando la participación de los actores interesados en su diseño y aplicación. Dicho mecanismo evaluará los efectos territoriales y sobre el medio y la sociedad rural de las políticas públicas y la metodología de evaluación específica, tendrá en cuenta los principios, recomendaciones y herramientas propuestas por la Unión Europea.

Si se aplica de manera seria y constructiva, la ley en su conjunto y el instrumento representan una buena oportunidad para los territorios rurales. Analizar el impacto de cualquier ley sobre el medio rural, seguro que dará mucho juego. Evaluar el efecto territorial de cualquier ley permitirá además concretar su impacto en las distintas realidades rurales, incluyendo la específica insular. Sobre la base de esta ley se analizará, desde un plan de carreteras y de infraestructuras viarias, un plan de mejora de las infraestructuras de depuración de aguas, un plan de energías renovables, la ley de residuos, o el diseño del mapa de servicios sanitarios y educativos.

Ahora bien, para que la oportunidad se concrete en hecho positivo, y para evitar que se conviertan en un nuevo trámite y obstáculo administrativo, se requieren varias condiciones. Estas condiciones son especialmente valiosas porque nacen de la evaluación realizada por los países que ya lo han implantado. En primer lugar, crear un organismo autónomo e independiente encargado de aplicarlo y que tenga el reconocimiento gubernamental. Garantizar que los informes son tenidos en cuenta en el diseño final de las políticas. Dedicar un tiempo suficiente y sosegado a elaborar la lista de indicadores de evaluación que sean objetivables, y que al mismo tiempo se puedan adaptar a cada caso. Trasladar este mecanismo a los gobiernos autonómicos. Finalmente, contar con la participación de toda la sociedad civil implicadas, desde las organizaciones agrarias a las entidades de desarrollo rural o las asociaciones de mujeres con presencia en el medio rural. Sin duda parece que el mecanismo necesitará de un desarrollo reglamentario. En este caso más que celeridad improvisada, prefiero sosiego y consistencia para no perder la oportunidad.