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Jose Jaume

Desde el siglo XX

José Jaume

¿Y si los socialistas dejasen de apuntalar a la Monarquía?

El sostén de la Corona es inequívocamente el PSOE de Pedro Sánchez; es pertinente preguntarse qué acontecería si los socialistas optasen por reivindicar la república

¿Y si los socialistas dejasen de apuntalar a la Monarquía? Raúl Terrel

«¿Explicaciones de qué?» respondió desafiante Juan Carlos de Borbón a la pregunta de si las ofrecería a su hijo Felipe VI sobre sus múltiples desmanes, respuesta en la mejor tradición borbónica acompañada de provocativa carcajada. Bien, del encuentro en Zarzuerla, sede de la jefatura del Estado, hay que resaltarlo, nada se sabe al margen del oficial comunicado, insulso, carente de interés, como todos los que acostumbra a evacuar la Casa. Juan Carlos de Borbón ha puesto a la Corona, a su sucesor, su hijo Felipe VI, en tesitura harto complicada. El tiempo nos dirá si la herida infligida desencadena mortal septicemia. No lo descartemos. Por ahora el actual jefe del Estado halla seguro cobijo bajo el paraguas que mantiene abierto el PSOE. Lo viene haciendo desde que en 1978 acordó el pacto constitucional que alumbró la Carta Magna. Ahí sigue. Inamovible. Resiste los embates del magma profuso, confuso y difuso que hay a su izquierda y las absurdas invectivas que se prodigan desde la derecha, campo que quiere usufructuar suicidamente (para la continuidad dinástica) a la Monarquía borbónica. Lo del PP, también con Núñez Feijóo, constituye tal insensatez, que cuesta entender a qué diantres está apostando el partido conservador, salvo que nos maliciemos que ha optado por promover un sustancial cambio de régimen. Para empezar viene abjurando de las denominadas «nacionalidades». Sus acólitos de Ciudadanos, a través de Inés Arrimadas, en trance de jubilación, promueve la reforma agravada de la Constitución, del Título II. Ahí es nada: abrir la caja de los truenos para que todo, absolutamente todo, entre en barrena. Botarates.

Así las cosas adentrémonos en una posibilidad que siempre sobrevuela los congresos del PSOE y es sistemáticamente cercenada de cuajo por la dirección del partido. Hasta hoy. ¿Qué sucedería si los socialistas optasen, ante la presión cada vez más furibunda de las izquierdas irritadas, independentistas irredentos y asociados, dada la ilegítima apropiación de la Corona por las derechas, por retirarse del pacto constitucional optando por la instauración de la tercera república? Sin duda la crisis de régimen sería irreversible. Sin el PSOE (los ridículos monárquicos que defienden a Juan Carlos y jalean sus chulerías deberían saberlo) no hay monarquía en España. No se sabe lo que nos depararía ese futuro, pero sí puede anticiparse que los Borbones, una vez más, marcharían raudos hacia el exilio. Viene ocurriendo desde las postrimerías del siglo XVIII cuando el miserable sin paliativos, traidor integral, que fue Fernando VII (enterrado en el panteón de reyes del Escorial para escarnio de la ciudadanía) despachó a su padre Carlos IV de mala manera. Alfonso XII lo hizo con Isabel II. La República con Alfonso XIII. El general Franco y Juan Carlos con Juan de Borbón. Tenemos lo que tenemos.

Felipe VI es corresponsable de lo que sucede. El comunicado con el que renunció a la irrenunciable herencia de su padre, cuando se supo de sus defraudaciones multimillonarias, el mismo día en el que se decretaba el confinamiento, fue de un cínico oportunismo. Felipe VI no ha ofrecido, ni lo hará, explicaciones válidas. El PSOE y el PP apañan ridículas medidas de transparencia para la Casa Real al ser incapaces de aprobar la imprescindible ley de la Corona e inmediatamente la derecha sale en tromba a defender a Juan Carlos (las declaraciones de José Luis Martínez Almeida, sobrevenido alcalde de Madrid, son de vergüenza ajena, además de estúpidas, a tono con el personaje) para dejar solo al PSOE sosteniendo a Felipe VI, además de afirmar, lo dice Núñez Feijóo, que los socialistas van a por él. Majaderías sin fin.

Regresemos a la pregunta: ¿si el PSOE se declara formalmente republicano, si retira su firme respaldo al pacto sellado en 1978, qué sucedería en las Españas? De seguir así, que lo imposible dejará de serlo, esté el PSOE gobernando o en la oposición, que será lo de menos, porque se abrirá la aplazada crisis de régimen por la que algunos, a derecha e izquierda, suspiran.

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