En el curso 2018-19 había en España 10.264 centros con 472.625 alumnos y alumnas de 0 a 3 años. De estos, 4.894 centros eran públicos, con 241.846 alumnos y alumnas, que suponían un coste global de 1.330 millones de euros anuales.

¿Quien asumió estos costes?

En su mayor parte, estos costes, fueron asumidos por los Ayuntamientos y las propias familias, y en algunas CCAA también fueron asumidos por los gobiernos autonómicos

¿Y cuál fue la aportación del Ministerio de Educación?

Cero euros.

Desde el año 1990 las leyes educativas establecen que las administraciones son las responsables de la oferta educativa de cero a tres años. Los Ayuntamientos no tienen competencias educativas y, sin embargo, ante la inhibición del Gobierno Central y en muchos casos, también de las autonomías, son los que asumen mayoritariamente los gastos de la educación de los ciudadanos y ciudadanas españoles más pequeños/as.

Tan sólo el efímero Plan Educa3 (2008) supuso alguna aportación del Gobierno de España a la creación de plazas: el 50% del coste, el restante 50% lo tenían que asumir los ayuntamientos.

¿Y cuál fue la aportación de Madrid para el sostenimiento de plazas del Plan Educa3?

Cero euros.

¿Cuánto representa el sostenimiento de plazas anualmente?

Se puede calcular en 12.000 euros el coste medio de la creación de una plaza escolar de 0 a 3 años. El funcionamiento de esa plaza asciende a unos 5.500 euros anuales. Es decir, construir cuesta prácticamente lo mismo que mantenerla en funcionamiento durante dos años.

Hagamos un cálculo a 10 años vista:

a) La construcción de las 241.800 plazas públicas había costado 2.902 millones de euros.

b) El mantenimiento de esas plazas durante 10 años ha supuesto 13.301 millones de euros.

c) En total, la construcción y el sostenimiento de estas plazas, ha costado 16.203 millones de euros en su mayoría pagados por las familias, los ayuntamientos y alguna CCAA.

Es decir, en esos 10 años el ministerio de Educación habrá aportado un 6,1% del coste de la educación del alumnado de cero a tres años si se cuentan los 1.000 millones que dijeron se invertirían en el Plan Educa3.

No podemos olvidar que, con este sistema de sostenimiento, las familias están aportando una parte importante del coste de la plaza y se están excluyendo a muchas otras familias, las cuales dada su situación económica/social no pueden hacer frente a estos pagos. Es por eso por lo que pensamos que este sistema de sostenimiento debería analizarse bien, pues no ha resultado, ni resulta compañero de la equidad, pues los niños y niñas de familias con pocos recursos se han visto y se ven excluidos, al no poder asumir el elevado coste que representa para una familia acceder a una plaza de Educación Infantil.

Actualmente, parece ser que el Gobierno de España ha hecho propósito de enmienda.

En el 2018 anunció la universalización del 0-3.

En el 2020 aprobó una disposición adicional tercera en la LOE–LOMLOE que reza: «En el plazo de un año desde la entrada en vigor de esta Ley, el Gobierno, en colaboración con las Administraciones Educativas, elaborará un plan de ocho años de duración para la extensión del primer ciclo de Educación Infantil de manera que avance hacia una oferta pública suficiente y asequible»... «se tenderá a la extensión de su gratuidad, priorizando el acceso del alumnado en situación de riesgo de pobreza y exclusión social».

Extensión, gratuidad y equidad… significan inversión.

La LOGSE prometió sin cumplir, la LOE renovó promesas e incumplimiento. Con la LOE-LOMLOE... ¿se atreverán nuevamente a decepcionar?

¿Se atreverán a seguir obligando a las familias y a los Ayuntamientos a cargar con los costes?

Las decepciones alimentan las rebeldías.

El secreto está en la adicional tercera.

Deseamos y esperamos que la responsabilidad y el cumplimiento de lo ratificado por el Gobierno Central sea una grata sorpresa para todos y todas, niños y niñas, familias, entidades y profesionales que trabajamos en y por la educación de los niños y niñas de 0 a 3 años en España.