Una vez implantada la PCR con meses de retraso, solo falta decidir quién le pone el cascabel al gato contagioso, porque:
Una PCR a toda la familia sale más cara que el paquete turístico en Mallorca.
El coronavirus no infectó Mallorca desde Londres y Berlín, sino desde Madrid y Barcelona (para reexportarlo después desde la isla a Londres y Berlín).
Las multas abusivas de miles de euros solo tienen por objetivo criminalizar al conjunto de la sociedad, la variante de la Ley Mordaza sanitaria.
Dado que nadie vigilará la PCR obligatoria en Son Sant Joan, se pueden utilizar los mismos folletos que los turistas tampoco rellenaban, con los bolígrafos sujetos con cordeles.
No hay países emisores con una situación peor que Mallorca, los turistas deberían exigir la PCR a los nativos.
