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Bernat Jofre

28A: Finlandia no queda tan lejos

Una campaña electoral un tanto gris va llegando a su fin. Electorado sin mucho interés. Actos poco multitudinarios. Más aparatismo que votantes de a pie en ellos. Candidatos de bajo perfil. Excepción hecha de un presidente seguro de sus posibilidades. Discurso constructivo: sonrisas, cohesión económica y nacional. Futuro esperanzador. Ése és el mensaje socialista. Muy diferente al del principal aspirante conservador. Insultos dirigidos a sus oponentes cada vez que atisba un micrófono. En el Partido Popular se detecta cierto pánico a quedar por debajo del 18%. Mucho dinero a devolver podría explicar el exceso de nervios en el bando de las gaviotas.

En el teórico centro, un líder que desde la manifestación de Colón parece haber perdido fuelle. Como hombre carismático y como centrista moderado. Fichando para su formación los despojos que otros han desahuciado. Más preocupado en captar los votos de extrema derecha que en afianzar los suyos. Su problema: la ciudadanía no suele premiar el travestismo político. Si no supera el 17%, se intuye el relevo, Inés Arrimadas. Gustan especialmente la sobriedad y pasión parlamentaria de la catalanoandaluza.

Siguiendo con la oferta, llegamos al líder obrero. Ha aprendido a purgar rebeliones internas. Como Guerra, Aznar o Pujol en su día. Carrillo estaría orgulloso. Se le considera ya miembro de la "casta" por pleno derecho. Con dos legislaturas en su haber, se ha ganado la antes denostada jubilación del diputado. Suficiente para quien tiene un chalet que pagar e hijos que criar. Ha llegado a una conclusión: pactar con el hermano mayor de la izquierda sale más a cuenta que intentar asaltar el Palacio de Invierno.

Llegamos al Grupo Mixto. Con las minorías nacionalistas y regionalistas. Suelen sacar entre un 10% y un 12%. Parece ser que se va a cumplir la regla.

Pero en estos comicios los focos se dirigen hacia Santiago Abascal. El carismático líder de Vox. Está revolucionando el mapa político español. Removiendo conciencias. Despertando dos dormidos conceptos: Orgullo y Honor, los mismos que campean en muchos acuartelamientos nacionales. Alerta con el voto militar: centenares de miles de almas viven con y de ese lema. También el religioso, hasta ahora cautivo del PP. Orgullo y Honor. Palabras con las cuales se criaron millones de españoles durante siglos. Perviviente aún en la "España vacía", esa veintena larga de provincias de tres a cinco escaños. Cincuenta sin dueño claro a día de hoy por la ley de Hondt. Justo donde se conoce mucho y bien al vasco: ha recorrido su geografía pueblo a pueblo. Páramos habitados por gente recia y austera. Crecida en el terruño y sus tradiciones. Poca broma: misa semanal y paseo honrando la rojigualda. Fuerzas Armadas, fiesta nacional y caza, sagradas. España en estado puro. El contexto social donde Vox puede sacar muchos votos. Pero también en los antiguos "cinturones rojos" metropolitanos. Hoy también azules.

Para salir de dudas, podemos echar mano de las matemáticas. También de la evolución de intención de voto. En tres oleadas: junio y septiembre del 2018. Abril del 2019. Reflejadas por las tres principales empresas demoscópicas del país. De entrada, muchos interrogantes y nada definido: 20/25% indecisos. Van a decidir, como casi siempre. Atención a los estudios de voto. El PP pierde entre un 3% y un 4% por prospección. Lo que sube Vox: del 0,3% al 12,5% en un año. Y subiendo. Otra premisa:cuidado con el famoso 'voto oculto'. Vox y UP pueden fundamentar buena parte de sus expectativas en él. Así como el PSOE. Los últimos, para acercarse o superar el 30% de votos reales y por tanto los 150 escaños. Los segundos, para no bajar de la horquilla que va del 13% al 14,5%. Traducido: 35-45 representantes. Los primeros, para aspirar a superar la barrera mágica del 15% .Por ende entrar en San Jerónimo con 50 sillones. Han leído bien. Si se diese el último supuesto, el cambio de paradigma político en España podría ser antológico.

Alguien podría tener mucho tiempo libre para rehacer su máster. España no estaría tan lejos de Finlandia.

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