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Matías Vallés

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Matías Vallés

El turismo alemán cae en Mallorca, Canarias, Grecia, Turquía y Egipto

Recuerden dónde leyeron antes que sa Feixina era el punto ideal para lanzar la campaña de Vox. El neofranquismo celebra su monumento intacto gracias a llorones incapaces de derribarlo como Biel Barceló, el lince que fichó a Pilar Carbonell, a Pere Muñoz y al cómico Benjamí Villoslada. Se creen los reyes del kikirikí y no pasan del cocoricó.

Ni por ésas logrará Vox arrancarme de mi sueño, convertirme en el último votante del PP. Y mientras los provincianos señalan al brexit, nosotros acudiremos a nuestra auténtica patria prusiana. La revista alemana FVW no necesita recomendaciones en el mundo del turismo. Les reproduzco sus datos aciagos sobre las reservas del mercado germano en destinos variopintos:

Palma (Mallorca): —11%

Tenerife (España): —21%

Las Palmas (España): —25%

Fuerteventura (España): —36%

Antalya (Turquía): —18%

Hurghada (Egipto): —28%

Marsa Alam (Egipto): —19%

Rodas (Grecia): —1%

Hasta un hotelero puede apreciar que si el turismo alemán se desploma en Mallorca, Canarias, Turquía, Egipto y Grecia, la razón no puede deberse a la ecotasa felizmente restablecida por la izquierda y que el PP solo mantendrá si gobierna (ahórrense las carcajadas). Se ve superada en relevancia por los veranos cada vez mas cálidos en Alemania y más insoportables en las plazas mediterráneas, pero esta evidencia implicaría admitir el cambio climático.

En las reticencias también influye el retraso de las reservas para encontrar precios óptimos en internet, todavía llevo clavada la mirada displicente del hotelero a quien pregunté sobre la pujanza de la red. La caída generalizada arruina el elaborado argumento del grupo de cabildeo Exceltur, cuando gimotea que "es importante destacar y censurar por su inoportunidad el impacto negativo de medidas que penalicen la actividad, como la elevación de la tasa turística en Balears". ¿Y en Egipto?

En la imagen que hoy nos ilustra, se comprueba que los vecinos de un edificio de la barriada palmesana de s'Escorxador pretenden librarse del acoso de los partidos políticos, anunciando en la puerta que ya tienen decidido su voto. La determinación, casi fiereza, del texto permite arriesgar deducciones sobre el destino final de los sufragios ya comprometidos. Olvidan sin embargo la obstinación de los partidos en campaña.

La Agencia Balear del Agua o Abaqua, a la cabeza de las empresas públicas del Govern con más de cien millones de presupuesto, ha sido denunciada ante la Inspección de Trabajo por su comité de empresa. El documento acusador que tengo ante mis ojos lleva fecha de entrada del 18 de marzo y adjunta cuatro tupidos folios, centrados en incumplimientos del estatuto de los trabajadores y del convenio laboral de la comunidad. Tanto el conseller Vicenç Vidal como el socialista Antoni Garcias empotrado en la presidencia de Abaqua, saben perfectamente hacia quién se dirige el descontento de sus empleados.

Gonzalo Espino Cruz, nombrado Jefe Superior de Policía de Balears a dedo por el PSOE, era el responsable de la seguridad de Sofía de Grecia. Seguro que la Reina, ferozmente comprometida en la lucha contra el narcotráfico por su implicación en la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, estará encantada del trato regio que en la Jefatura se dispensa a un tal Cursach.

Todos se preguntan a qué licenciado en Ciencias de la Comunicación le está adjudicada de antemano la jefatura de investigación de la Oficina Anticorrupción. Para camuflarlo, han levantado la cortina de humo de que las plazas económicas y de inspección también consideran esa licenciatura. Vean La caída del imperio americano, porque mi gurú me ha regañado por el retraso en recomendarla. El cinéfago irredento solo tuvo ojos para Maripier Morin (32) y a mí me rindió para siempre Maxim Roy (47).

Reflexión dominical inmobiliaria: "El único mallorquín bueno es el mallorquín desalojado".

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