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Ramón Aguiló

Escrito sin red

Ramón Aguiló

Tramposos y tramposas

1. Borrell, ministro de Estado, ha perdido una ocasión extraordinaria para explicarnos, con su privilegiada inteligencia, con ocasión de su convicción personal, coincidente con la de los que quisieron destruir el Estado, que los independistas presos deberían estar en libertad condicional, asegurando al mismo tiempo la imposibilidad de una huida similar a la de Puigdemont y compañía, de qué forma el juez Llarena habría podido realizar tan espectacular virguería. Sin duda los jueces, Llarena incluido, habrían agradecido tan crucial y desconocida aportación a la seguridad de los procesos judiciales.

2. Leire Pajín y Bibiana Aído destinaron, según El Confidencial, 400.000 euros a la directora del curso en pleno máster de Carmen Montón, Laura Nuño, militante de IU y directora de la tesis de Pablo Iglesias. Todas las irregularidades, matrícula fuera de plazo, aprobados sin ir a clase, notas modificadas en actas cerradas y, finalmente, la información de la Sexta de la tarde del martes que precipitó una dimisión negada por Sánchez tres horas antes, el plagio en el trabajo de fin de máster. Por la mañana, Montón negaba ante Pepa Bueno, con melifluos ademanes de inocencia cualquier irregularidad suya, responsabilizando a la URJC de las presentes en el expediente. En rueda de prensa posterior proclamaba con impostada indignación la ausencia de irregularidades, su honestidad y, elevando la voz, su "no todos somos iguales". Todo falso. Mentirosa, deshonesta. Con razón se negaba a enseñar y dejar fotocopiar su TFM. El PP afirma que no hay relación con el máster de Casado. Distintos y distantes. Si es verdad, ¿por qué se niega Casado a enseñarlo? ¿Por qué no hace pública Sánchez su tesis doctoral, por qué miente? Lo único que se puede encontrar en Teseo es una ficha y un resumen de la tesis. Es complicadísimo acceder a ella en la universidad Camilo José Cela. Manuel Conthe, exsecretario de Estado de Economía, lo ha hecho y su diagnóstico es: "de una calidad ínfima, sus conclusiones rezuman mediocridad intelectual, superficialidad e inanidad". Aun así fue calificada por su tribunal con un apto cum laude. Lo que ilustra no sólo sobre la mediocridad de Sánchez, sino del sistema universitario. Las conclusiones del PSOE, surrealistas: "La dimisión de Montón, un ejemplo de regeneración democrática, un hecho grandioso". Así se disfraza una dimisión arrancada por la prensa libre.

3.El martes de la pasada semana Margarita Robles, ministra de Defensa, anunciaba la decisión del Ejecutivo por la que iniciaba los trámites para paralizar la venta de 400 bombas de precisión láser a Arabia Saudita (9 millones de euros), por su posible utilización contra los rebeldes hutíes que controlan Saná, en Yemen, dejando sin efecto el contrato de 2015. Después de que Arabia amenazara con suspender el contrato para la construcción de cinco corbetas por 1.800 millones de euros a Navantia, Cádiz se incendió y las empresas españolas involucradas en obras como el Ave a la Meca o el metro de Riad entraron en pánico. El pasado fin de semana, Robles, digiriendo aún la paralización con patatas fritas, admitió que la venta no está suspendida, sino "en fase de estudio". En plan Rottenmeier declaró irresponsable vincular los dos contratos y acusó de irresponsabilidad política cuando no electoralista a quienes lo hacen. La ministra de un gobierno cuya única labor es la propaganda electoralista. Borrell ha ratificado la venta. Ante tanto buenismo e incompetencia, recordemos a Palmerston: "Inglaterra no tiene amigos permanentes, ni enemigos permanentes, tiene intereses permanentes". O a Robert Kaplan en La venganza de la geografía: "Que una nación sea una democracia no significa necesariamente que su política exterior resulte mejor o más progresista que una dictadura; democracia y moralidad no son sinónimos". O a Nicholas J. Spykman: "La lucha por el poder no está diseñada para alcanzar una serie de valores morales; los valores morales se utilizan para facilitar la obtención del poder". O a Ashley J. Tellis ( Carnegie Endowment): "El realismo refleja a la perfección el comportamiento real de los Estados, detrás de la fachada de lo valores en que basan su retórica". Recuérdenlos cuando oigan bondades a Iglesias, o a Pedro Sánchez.

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