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Palma territorio prohibido

La propiedad es la facultad o el derecho de poseer algo. En el caso que nos ocupa, un piso en el término municipal de Palma. Has pagado con el esfuerzo de tu trabajo o capital acumulado un inmueble que conlleva una serie de obligaciones por ley, ya sea el pago del IBI, el impuesto de basuras, las cuotas de la comunidad de vecinos si las hubiere y respetar las normas de la comunidad de vecinos.

Antes, la LAU te permitía alquilar tu piso a quien dispusieses, siempre dentro de la libertad individual de tus decisiones con tu propiedad. Es realmente lícito dejar un piso vacío todo el tiempo que su propietario consideré, ya es suyo, pertenece al ámbito de la propiedad privada y puede hacer lo que considere más oportuno. Actualmente gracias a la permisividad de los partidos de izquierdas, siendo los principales demagogos la "casta" de Podemos, tenemos que instalar una puerta "antiokupas" para poder proteger nuestra propiedad".

Esta semana la coalición de PSOE, Més y Podemos del ayuntamiento de Palma han decidido prohibir el alquiler vacacional a los propietarios de pisos de nuestra ciudad. Siempre prohibir, imponer a los ciudadanos con una ley que atentan en contra de la propiedad privada de cada ciudadano.

No sería más conveniente regular, organizar, limitar una actividad que se desarrolla en todos los países del mundo y en los destinos turísticos más, debido a los cambios de los hábitos, que son ya completamente diferentes. Los turistas no quieren la triste y cara habitación de un hotel, donde son ordenados y les dan un buffet disfrazado con múltiples salsas de materias primas congeladas.

Quieren disfrutar de la ciudad, como uno más. Alojarse en apartamentos individuales, que les permita ejercer su "libre albedrío" a un mejor precio y confort.

El propietario es partidario de la regulación. Quiere pagar impuestos al igual que los empresarios por una actividad lícita, que para muchos jubilados o familias con una segunda residencia ha sido un verdadero alivio para sus economías.

Pero de un plumazo, con un estudió que ha costado 17.000 euros, la coalición de partidos que gobierna Cort han decidido lo que supuestamente es bueno para los ciudadanos de Palma.

Si es cierto que el centro de Palma, al igual que en todas las ciudades de Europa el alquiler se ha disparado, ya que si quieres vivir en el meollo de la ciudad, como es lógico te va a costar más caro. Pero esto siempre ha existido. Los alquileres de las calles Jaume III o del Passeig Mallorca, siempre han estado por la nubes, antes, ahora y el futuro.

Falta ahora y siempre en Cort, un plan urbanístico serio que organice bien la ciudad para poder dar una respuesta válida a todos los segmentos:

- Clases necesitadas o de rentas bajas: vivienda social urgente. No sé desde hace cuantos años se realizó la última promoción de VPO real. Todos estos años han sido parches políticos de cara a la galería. No ha habido un compromiso serio y real de crear una verdadera política de vivienda social en el tiempo.

- Población flotante: durante todo el año son innumerables los trabajadores que se desplazan temporalmente. En invierno el 90% de los empleados de la construcción viene de la península y en verano, cada vez más son las cadenas hoteleras las que tiene que alquilar casas y pisos para que se puedan hospedar sus trabajadores, llegando al caos en Eivissa.

- Familias residentes que no pueden o no quieren comprarse una vivienda y optan por el alquiler como modo de vida.

- Turistas que ya no quieren alojarse en hoteles y prefieren la modalidad de apartamentos o casas.

Tenemos un 'tótum revolútum' que no se soluciona prohibiendo, sino ordenando. La chapucera zonificación del Consell, lo que va a provocar es una desigualdad manifiesta de oportunidades. Unos municipios sí podrán y otros no. Ciudadanos de primera en Palma que disponen de una casa unifamiliar que si podrán y los pobres desgraciados que tiene un piso, no podrán.

Menos mal que los autores de este abuso es la coalición de PSOE, Més y Podemos, que supuestamente representan a la izquierda, ya que los principales beneficiados, como siempre serán los hoteleros. Vuelven a conservar parte importante de su pastel, por obra y gracia de estos políticos. Gracias a que en democracia tenemos la oportunidad de echarles en las próximas elecciones e intentar organizar este caos urbanístico de Palma bastante complicado.

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