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Al Azar

No es Marivent, es el Dique

Le preguntan a Humphrey Bogart:

-¿Por qué vino a Casablanca?

-Por las aguas.

-En Casablanca no hay aguas.

-Me informaron mal.

Los cinéfilos de Podemos también pecan de desinformación sobre la geografía donde han aterrizado. Le impusieron a Francina Armengol el gesto revolucionario de la apertura de los jardines de Marivent. Es el único apartado cumplido del pacto de Govern y, como de costumbre, se equivocaron de sitio. Unos escasos metros a la izquierda según se mire, el fantástico Dique del Oeste permanece clausurado para los mallorquines. Con su aspecto agreste y sin la falsificación del ajardinamiento, ofrece un recorrido sugestivo y las únicas vistas del Paseo Marítimo no entorpecidas por el aparcamiento de barcos en que ha degenerado la fachada de Palma.

La expropiación de Marivent suministrará a Letizia la excusa que necesita, para no volver a pisar tierra mallorquina. Por citar de nuevo a Casablanca, es el final de una gran enemistad. Resulta paradójica la avidez de los presuntos republicanos por instalarse en los dominios regios, aunque siempre es un avance sobre los tiempos en que deseaban dinamitarlos. En cuanto al dudoso fervor popular, la adyacente Fundació Miró ofrece más atractivos paisajísticos, arquitectónicos y artísticos, salvo que no conozco a nadie que la visite. De hecho, sería sospechoso quien así lo hiciera.

Se difunde Marivent en las únicas fechas en que no interesa, porque se busca proteger a los palmesanos de un tropiezo inoportuno en los días de vacaciones de la Familia Real. Por supuesto, la apertura popular o populista costará una pequeña fortuna en mallas, adecentamiento, personal, cámaras de vigilancia, bancos y papeleras. Es decir, asistimos a la urbanización de los jardines de Marivent. Este protocolo fenomenal es innecesario en el Dique del Oeste, donde basta con abrir una cancela de la amplitud de un mallorquín en la verja. Después de la maniobra de distracción palaciega, Podemos debe exigir a su presidente de la Autoridad Portuaria que devuelva el Dique a los mallorquines.

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