Bajo el título Volver a abrir los centros de salud, el doctor Thomàs, actual diputado y exconsejero de Salud, loa con expresiones estereotipadas y grandilocuentes, pero vacuas de contenido, las supuestas bondades de la ampliación horaria por las tardes, desde las 17,30 a las 20,00 en los centros de salud, pero elude hablar de las notorias dificultades que entrañará la medida, que reconoce subliminalmente como de justificación electoralista al señalar que cumple un compromiso electoral con los ciudadanos. Titula el panegírico 'Volver a abrir los centros de salud', engañoso por demás, puesto que sugiere que estaban cerrados por la tarde, cuando estaban abiertos para la atención ordinaria hasta las 17,30 y después lo estaban para la atención de urgencia en muchos casos.

Esta réplica se dirige a desvelar aquellas cuestiones que silencia adrede, puesto que solo se refiere a generalidades como la accesibilidad, calidad asistencial, derecho de salud, reactivación de la atención primaria, amplía servicios, bla, bla, bla? añadiendo una falacia: amplía el personal. Este último aserto, es precisamente el meollo de la cuestión: la insuficiencia del actual personal para cubrir la ampliación horaria. Nada menos que 36 coordinadores de equipo de Atención Primaria, o sea los directores de los centros de salud, han expresado públicamente y por escrito esta objeción diciendo, entre otras cosas, que hemos expresado nuestra disconformidad al cambio sin que lleve aparejado un aumento suficiente de las plantillas, o que al no preverse aumento alguno de las plantillas, no podemos asumir ninguna responsabilidad por las disfunciones que se produzcan por carencia de suficiente personal o por los descubiertos de puestos de trabajo.

El doctor Thomàs prefiere ignorar a tan cualificados profesionales y no dedica ni una palabra a este asunto. Tampoco se refiere a la oposición unánime de todos los sindicatos representados en la mesa sectorial de Sanidad. ¿Les ha aplicado a todos el viejo dicho el menor desprecio es no hacer aprecio? Y por supuesto, también ignora a la inmensa mayoría de los trabajadores, cuyo derecho a la conciliación de la vida laboral, personal y familiar se ve afectado por la medida, sin que ello revierta en mejorar la asistencia, pues las horas de más por la tarde suponen que dejen de trabajarse por la mañana, pues la medida no pueden entrañar un aumento de la jornada laboral. Además, el sistema de cita previa permite a los ciudadanos ser atendidos en un muy breve plazo de tiempo y escoger la hora que más le convenga, y quienes no podían esperar para ser visitados disponían de los servicios de urgencia de atención primaria en los PAC.

La decisión estaba tomada de antemano al simulacro de negociación en la mesa sectorial y lo estaba porque era una de tantas promesas electorales hechas al tun tun que han querido cumplir a costa de los trabajadores y sin un real y efectivo incremento de la calidad asistencial del sistema de salud, que créalo o no se basa en el trabajo de los profesionales y la satisfacción de los mismos al prestarlo en horarios compatibles con el tan cacareado derecho a la conciliación laboral-familiar. Doctor Thomàs, usted sigue siendo médico a pesar de que lleve mucho tiempo muy alejado de la práctica clínica. Usted conoce el imperativo deontológico, que obliga al médico a denunciar situaciones y contextos en los cuales no estén garantizados los estándares clínicos necesarios para que se pueda desarrollar una praxis asistencial adecuada. Por este motivo el 75% de los coordinadores de los centros de salud están en contra de la decisión urgente de aumentar el horario de las tardes. No está garantizada la viabilidad, en todos los contextos, por la insufiencia de recursos humanos. Por eso llevan al juzgado de guardia un escrito exigiendo ser eximidos de cualquier responsabilidad en el nuevo horario de apertura de los centros por la tarde. Ya sabemos que la responsabilidad es personal, pero los ciudadanos deben de saber que la accesibilidad es secundaria a la garantía de la calidad y calidez asistencial. Contéstenos ¿es viable en estos momentos? ¿hay suficientes recursos para ponerla en marcha ya? ¿No le sorprende que la mayoría de los coordinadores estén en contra de esta medida? Ellos opinan que no, por eso el conflicto sigue abierto. Hable con ellos, escuche sus argumentos. No repitan el error de la carrera profesional. Nosotros denunciaremos cualquier incidencia en la cual sea perjudicado el ciudadano, por la carencia de recursos humanos y técnicos. ¡Ah! y no lo olvide, aún, aquí y ahora que estamos en derrota pero nunca en doma.

(*) Psiquiatra en Son Espases y coordinador del Centro de atención integral de la depresión