Diario de Mallorca

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En un vuelo de regreso a Mallorca, que tuvo demora en la salida "por razones técnicas" (sic), una vez autorizado el embarque y ya dentro del avión se anunció un nuevo retraso porque un pasajero había embarcado su equipaje mientras que él seguramente había decidido no seguir a su maleta, no volar. Para los que viajan con frecuencia resulta difícil de entender que alguien haya puesto sus enseres en el avión y ese mismo alguien haya tomado la decisión de no subir al aparto. El ser humano es complejo, ya se sabe, pero esta forma esquizoide de viajar, "envío la maleta y yo me quedo en tierra" resulta un enigma, el equipaje solo no suele ir a ninguna parte. Pero lo más asombroso es que se pueda localizar el fardo en la panza de un avión entre cientos de ellos, ¡prodigioso!

El malhumor del pasaje fue en aumento por las insultantes esperas, hasta un punto cercano al motín, levantamiento que se propuso abortar el comandante arengando al personal. Por su fonética y cadencia expositiva parecía ser portugués o brasileño y además hacía uso de unos argumentos incoherentes, confusos e ininteligibles, sin embargo, la mayoría del pasaje consideró que lo que decía era razonable, si alguno no entendió el alegato otros se lo explicaron con razonamientos que poco tenían que ver con los del comandante, que por cierto no se sabía cuáles eran. Tres horas y media después de la hora prevista, el vuelo salió hacia Palma.

En la desesperante espera, después de haber terminado la lectura del libro que me acompañaba y de toda la prensa que pude conseguir, encontré en el bolsillo del respaldo del asiento delantero una revista en la que se anunciaba un producto que llamó mi atención, un inesperado "espray de oxitocina" al que entre otras virtudes se le atribuye la propiedad de proporcionar buen humor, sociabilidad, el éxito en el escarceo sicalíptico, el lance amoroso. El contenido se debe desparramar sobre uno mismo, está recomendado tanto para hombres como para mujeres, efectividad garantizada y todo ello por tan solo 11,40 euros. La Universidad de Sídney realizó un estudio con roedores en el que se demostró que inyectando oxitocina a ratones estos animalitos se volvían más amistosos, comunicativos y afectuosos con sus congéneres. Ignoro el número de genes, probablemente elevado, que los humanos compartimos con las ratas.

Debería advertir, el spray, de sus posibles efectos adversos, por ejemplo, que el amor muchas veces causa más preocupación que felicidad. Según un estudio de un grupo interdisciplinario italiano, la relación amorosa puede conducir a un desorden obsesivo compulsivo, nada aconsejable si se pretende mantener un cierto equilibrio psicológico. En cuanto a la mejora de la sociabilidad también habría que indicar que si los efectos de sociabilización son efectivos podrían transformar al individuo en uno de estos tipos tan simpáticos, tan afables, pastelosos, exageradamente positivos, que caen bien a todo el mundo, que siempre están eufóricos y de buen humor. Al poco tiempo estos personajes llegan a resultar fastidiosos, pesados y ¡cargantes! Téngase en cuenta que esta gente, además, no suele ser de fiar.

En cuanto a acabar con el mal humor, conviene recordar que el mal humor es un estado de ánimo, propio de seres inteligentes, puede ser una opción de vida que no debería ser perturbada. El malhumorado suele estar de mal rollo, revenido, disfórico, como dicen los ingleses "in a bad mood", están en resistencia ante todo. Puede ser como consecuencia de un mal funcionamiento del hígado o a la falta de relaciones sexuales y esto produce malestar crónico. Son personas tóxicas a las que hay que dejar a su aire y no intentar cambiarlas, ellos están bien así. No deberían de comprar el espray pues sus efectos podrían descompensarlos.

En cualquier caso, la vida es ardua y enredada y si con este nuevo espray se fuese a mejorar la atmósfera ciudadana sería muy bien venido. El ayuntamiento podría espolvorear oxitocina por las calles y el ambiente general, ahora crispado, mejoraría, la gente estaría mas simpática, tolerante, amistosa y se ligaría mas.

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