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Matías Vallés

Al Azar

Matías Vallés

Zapata y el honor de Bauzá

Llámenme islamófobo si lo desean, pero Irene Villa me parece una persona mucho más honorable que José Ramón Bauzá. En especial, al contemplar la ejemplar reacción de la víctima de unos etarras para quienes tiene que existir un infierno, ante los tuits idiotas de Domingo Zapata. "Ni me molestaron ni me he sentido humillada", declaró ayer mismo a este diario. Al encajarlos en el "humor negro", su testimonio ha sido decisivo para que el juez Pedraz archivara la querella de la fiscalía de Rajoy, en otro auto digno de los anales de la defensa de las libertades. En cambio, el afortunadamente expresident ha recibido seis mil euros del Supremo por unos insultos de Lorenzo Bravo cuya gradación es inferior a los ojos de cualquier observador. Con el agravante de que el político madrileño encarnaba el poder, mientras que Irene Villa es una ilustre ciudadana de a pie.

Quede claro que la libertad de expresión vuela muy por encima de Zapata, pero la fiscalía de Rajoy pretendía amedrentar a todos los usuarios de ese vicio. Quería rebajar el listón. Ahora, Sus Eminencias judiciales deberán explicarnos por qué el concejal de Madrid recibe amparo, mientras Bravo es condenado para complacer al gobernante que exige que "prepotente" sea un insulto. No vamos a descalificar la sentencia del Supremo, porque sería alinearse frente al auto igualmente discutible de Pedraz. Ahora bien, el ugetista mallorquín no llamó "cerdo" y gilipollas" al político que insulta a diario al PP balear, pronunció exactamente un genérico "son unos cerdos" y "hace el gilipollas". Otra vez, por debajo de la banalización pretendidamente jocosa de un atentado sangriento.

Ya sabemos que la vía penal no es la civil y que la justicia discurre por cauces retorcidos, pero en ambos casos se baraja la misma libertad de expresión. Quienes deciden sobre el intangible honor de las personas, deberían ser especialmente congruentes. Allá ellos con su Calderón, es un orgullo que Irene Villa defina por contraste el talante de Bauzá, hasta ayer Muy Dudoso Honorable. En cuanto al personaje público Zapata, mediremos su aguante cuando sea el destinatario de las mismas necedades que profirió.

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