Decía un político profesional que la promesas solo comprometen a los que se las creen. Intentaba explicar y justificar como la gran mayoría de los políticos en España, en la anorexia preelectoral y en pleno subidón verborreico, dicen y prometen cosas que luego no cumplen. Ha ahí el canon ético y estético de nuestra partitocracia. Y he aquí como se fabrica su desacreditación y la desafección que provocan en la sociedad civil. Las palabras de los políticos esconden y confunden más que aclaran. Son palabras sin brillo y sin toque de queda. Maltratan las palabras. No las matan porque las palabras nunca mueren. Las trasforman en pseudopalabras. Se las lleva el viento porque las palabras no son suficientes para cambiar nada si uno no se compromete con la acción. Pero hay lo que hay, y por motivos de salud mental hay que siempre, disminuir las expectativas para no autogenerarnos más dosis de frustración. Ahora bien, todavía conservamos la magnífica memoria que recupera para nosotros muchos recuerdos.

Hoy hay uno que predomina en el colectivo médico de las Balears. Tenemos más presente que nunca, una de las grandes promesas incumplidas por este Govern: la carrera profesional (CP) de los 4.000 médicos de nuestra comunidad. Todavía recordamos un acto del entonces "candidato" Bauzá, quien ante todo el aforo (en la ONCE) proclamó: "Recuperaremos CP para los médicos de Balears". La historia real fue, que varios meses más tarde nos recortó el 32% y queda un año y todavía no hemos negociado ni recuperado nada. Ahora tiene una magnífica oportunidad (la crisis se está superando) para cumplir su promesa preelectoral. La CP no es un capricho de la "clase médica" es el derecho legal establecido en tres leyes básicas del que se priva en su plenitud a los 4.000 profesionales de Balears.

La carrera es un derecho a progresar de forma individualizada, como reconocimiento al desarrollo profesional en cuanto a conocimientos, formación, docencia, experiencia en las tareas asistenciales, investigación y cumplimiento de los objetivos de la organización en la cual prestan sus servicios. Deriva de la ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS) del 2003, que se propuso tres objetivos: el reconocimiento legal a la excelencia en un sistema de desarrollo profesional homologable, la evaluación periódica y voluntaria de las prácticas profesionales y el impulso de un nuevo modelo de formación y aprendizaje. De ahí la articulación y la implementación a nivel estatal de la CP. El beneficiario último de la excelencia profesional: el paciente. Recientemente el conseller de Salut, el señor Sansaloni no para de alabar el buen quehacer, la responsabilidad y el compromiso del colectivo médico en mantener la calidad y la calidez asistencial en un contexto de austeridad y de recortes lineales en el ámbito de la sanidad pública.

El desgaste soportado por los 4.000 médicos del Servei de Salut ha sido muy importante ya que están obligados a desarrollar su tarea en unas condiciones éticas deficitarias y con una desmesurada lista de espera. Hemos pulsado el sentir y el pensar del colectivo médico a través de asambleas por cada centro y servicio hospitalarios. Las opiniones predominantes al respecto, son tres: agradecimiento al reconocimiento público del conseller, pero nosotros exigimos que las palabras „se las lleva el viento„, se complementen con el reconocimiento profesional y retributivo de la CP. Gran indignación por el estado de la CP en nuestra comunidad, generadora de un gran agravio comparativo. Apoyo unánime y total a la estrategia del sindicato medico de exigir la negociación para la normalización urgente de la CP. El Govern Bauzá está obligado a dar cumplimiento a la normativa básica que sustenta la CP.

Los datos vergonzantes y vergonzosos de la foto actual de la CP son estos: 1.- Balears es la única comunidad que no tiene CP ordinaria. Motivo: desidia e irresponsabilidad de los sucesivos Governs. Esto supone un injusto agravio interautonómico. 2.- El 49% del colectivo médico de las Balears, es decir casi 2.000 médicos no han tenido la oportunidad de acceder a la CP. Agravio intraautonómico mayúsculo, ya que los otros dos mil colegas han tenido la oportunidad de acceder, aunque la retribución no se corresponde con que lo que se debería (recortes, parón de la fase ordinaria). 3.- El año 2010 el exconseller doctor Thomàs abortó la CP, suspendiéndola y jibarizándonos el 25º% que quedaba para completar su totalidad. Ese dinero se incluyó en los 100 millones de euros que se derivaron de la conselleria de Salut, no a pagar proveedores sino a la cash one del señor Manera. ¿Inversiones silenciosas? Falacia patética inconmensurable. 4.- Posteriormente el proceso mutilador siguió: El Gobierno estatal recorto el 5% y el Govern balear del señor Bauzá nos recorto el 32%. Motivo: la crisis, como pretendida justificación del expolio más alto sufrido por cualquier CP autonómica. Esta suspensión ha incluido el 2012, 2013 y 2014. Hemos tragado pero aunque hemos masticado despacio todavía no lo hemos digerido, más aún cuando sabemos y conocemos la conservación de ciertos privilegios y prebendas insultantes. 5.- Este proceso expoliador no ha tenido parangón en toda España, el 32% es un hachazo descomunal. 6.- La media de recortes en CP entre el 2010-2014 en el estado ha sido del 11%, aquí del 50%. En Canarias el 4%. Esto muestra cuanto nos valoran nuestros políticos. 7.- En euros un médico con más de 20 años en el sistema público ha sido expoliado en unos 6.000 euros anuales y uno de más de 15 en 4.600 euros anuales. 8.- Por otra parte los 2.000 médicos que cobran la CP, son objeto del siguiente saqueo salarial: cobran un 43% del 75%. Esta situación solo se da en Balears. Responsables: el Govern Antich y el Govern Bauzá. 9.- Valencia y Aragón recuperan la CP. Esta claro respetan y valoran a sus médicos y lo demuestran con hechos no con el bla, bla, bla...

Los datos son demoledores. Los médicos nos preguntamos: ¿dónde han ido a parar todos los millones que nos han usurpado de la CP desde el 2010? ¿Acaso somos ciudadanos de segunda y tenemos que aportar más? ¿Somos objeto del respeto que nos merecemos? Somos infinitamente más valorados y necesarios que los políticos, ¿por qué en un contexto de austeridad, aportan ellos mucho menos que nosotros? ¿Dónde han ido a parar los euros del céntimo sanitario? ¿Y los de la tarjeta sanitaria? ¿Cuántos millones de euros suponen las prebendas? La regresión retributiva nos retrotrae al año 2005. La reducción salarial sobrepasa el 30% de nuestro salario y nos convierte en el colectivo más discriminado dentro del ámbito de los empleados públicos. Estamos asistiendo a un acoso y derribo, con un agravio sin precedentes de la clase política contra los médicos. Hace más de tres años que estamos aportando nuestro "granito de arena" para que la sanidad sea sostenible. Duele pero la realidad es así, los médicos de la sanidad pública de Balears son, con notable diferencia, los más agraviados y perjudicados de todo el Estado.

Ahora bien, el futuro está trazado. El Govern en la ley de presupuestos aprobó: "Se habilita a la mesa sectorial de Sanidad para que, a lo largo del año 2014, pueda negociar un nuevo acuerdo sobre el inicio de la fase ordinaria del sistema de CP del personal del Servicio de Salud de las Illes Balears, con efectos a partir del año 2015". Cúmplanlo. Les queda un año aproximadamente. El colectivo médico está indignado y la efervescencia irá in crescendo si en el año que queda de legislatura, el señor Sansaloni y el Govern Bauzá no negocian la puesta en marcha de la CP , una nueva fase de implantación y un cronograma de recuperación retributiva. Valencia y Aragón, ambas gobernadas por el PP y no habiendo cumplido el déficit, han recuperado la CP de sus médicos. Pregúntenles cómo lo han hecho e imítenlos. No hay que olvidar que la CP es un derecho no un mero incremento retributivo.

Por otra parte, Simebal recabará el apoyo del Colegio de Médicos, de la Real Academia de Medicina, de la Academia Medica Balear y todas las organizaciones sanitarias médicas de Balears para conseguirlo. El agravio no debe de continuar más. Para el Govern es una oportunidad, un reto y una tarea que están obligados a realizar. Para nosotros es el gran objetivo estratégico inmediato, al que dedicaremos toda nuestra energía, esfuerzo, dedicación y lucha. No engañamos a nadie y así lo hemos trasmitido a la Administración y se lo haremos saber al conseller el día 12 de mayo. Exigimos la restitución de lo que nos pertenece, ni más ni menos. ¡Ah! Y recuerden aquí y ahora que estamos en derrota pero nunca en doma. Y nunca olviden que como dijo un maestro " el cielo siempre esta arriba, solo hay que mirarlo".

*Psiquiatra en Son Espases y coordinador del Centro de atención integral de la depresión