¿Habrá sido sólo derrotado Obama o le habrán masacrado? Una caída así al abismo no puede explicarse con razones políticas al uso, pues ni su gestión de la economía ni su política exterior parecen haber tenido más errores que los que Bush Jr. le ha legado. En la corriente de fondo del populismo republicano se llega a acusar a Obama de comunista y de islamista, los rótulos que de forma sucesiva han venido identificando al enemigo mortal de América. ¿Su principal pecado?: intentar una sanidad para todos, o sea, la eliminación del infierno para los más pobres. Parece como si aquel que se ha librado de la pobreza extrema (no sólo el rico) dijese: no seré nadie si el que está por debajo sale del infierno. El mismo mecanismo que hacía que el odio al negro creciera, asimismo, entre los pobres. ¿Habrá también de eso dentro del odio a Obama, aunque no se mente? Un ominoso regüeldo del pasado.