Marcus Cooper Walz es el hombre del día. El palista mallorquín, nacido en Oxford (Inglaterra) hace 22 años, afrontará su debut olímpico en Río de Janeiro. Será a las 15:22, hora española, cuando el deportista del Real Club Náutico Portopetro se mida a sus rivales a los 1.000 metros del K-1 con el objetivo de meterse entre los cinco mejores de su serie, la tercera de las eliminatorias preliminares, y estar en las semifinales.

A esa hora, su actuación será con especial interés por los técnicos y deportistas de su club, el RCN Portropetro. Sus directivos, en colaboración con el Ajuntament de Santanyí, han organizado una reunión para ver en directo la prueba a través de una pantalla gigante que se ha habilitado.

Cooper, que se hizo con una medalla de plata en el Campeonato del Mundo disputado en Milán en 2015, se ha fijado como primer reto en su estreno olímpico meterse en las semifinales, pero no renuncia a estar mañana martes en la final y asegurarse un diploma olímpico que sería histórico. Pero antes deberá cumplir con los pronósticos que le sitúan en las semifinales. Y ya en la penúltima ronda lucharía por clasificarse entre los cuatro más rápidos y así disputar una final en la que estarán los mejores especialistas de una modalidad en la que el mallorquín ha progresado a marchas forzadas en el último año.

Habituado al 500 metros, a Marcus Cooper y su entrenador se les presentó la oportunidad de competir en los 1.000 metros al no tener objetivo deportivo para este año 2016. Los resultados fueron mejor de lo previsto en los primeros meses y se decidieron a apostar por un reto mayúsculo: luchar por la clasificación olímpica.

Río de Janeiro se convirtió en un sueño lejano, pero acabó haciéndose realidad y Marcus Cooper entrará hoy en la historia de Santanyí como su primer olímpico y en la de Mallorca y Balears como aspirante a todo en su estreno en unos Juegos.

No es fácil el reto, porque su prueba, el K-1 sobre una distancia de 1.000 metros, es una de las más exigentes.

Cooper, que desde hace unos meses se ha estado ejercitando en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid y que en el último año ha competido en diversas competiciones internacionales, ha preparado a conciencia su asalto a Río. Las últimas semanas de preparación las compartió con el resto del equipo español en tierras gallegas y la semana pasada pusieron rumbo a Brasil para aclimatarse a las condiciones con las que se van a encontrar desde hoy.