Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Series

'Cowboy Bebop': la misión imposible de llevar un anime a la imagen real

Netflix estrena este viernes, día 19, una frustrante adaptación a serie de imagen real del clásico anime de finales de los 90

John Cho, Mustafa Sakir y Daniella Pineda (más un delicioso Corgi galés) en ’Cowboy Bebop’.

'Cowboy Bepop'

'Showrunner' André Nemec

Intérpretes John Cho, Mustafa Sakir, Daniella Pineda

Plataforma Netflix

Episodios 8

Estreno 19 de noviembre de 2021

Si algo asociamos con el anime, o la animación japonesa, es la libertad de movimiento, su falta de remilgos a la hora de proponer premisas, saltarse reglas y construir mundos. Uno de sus ejemplos más canónicos: la serie de finales de los 90 'Cowboy Bebop', alucinante mezcla de géneros (ciencia ficción, wéstern, neo-noir) con banda sonora de jazz estilo años 40. Su director, Shin'ichirō Watanabe, sentó cátedra y creó afición al anime con esta burbujeante pero melancólica fusión de Oriente con Occidente. 

¿Se puede trasladar algo así exitosamente a la imagen real? Poderse, se puede: las adaptaciones de anime en carne y hueso no son rarezas, sino multitud, aunque rara vez entusiasmen a fans ni neófitos. Porque deberse, quizá no se deba: es complicado, por no decir imposible, trasladar la citada libertad de movimiento a una pieza audiovisual de imagen real convincente. 

Netflix ya lo intentó (y fracasó) hace cuatro años con su película basada en 'Death note', una importante traición al manga y anime originales, empezando por un personaje protagonista bastante menos incómodo. Ahora prueba suerte con 'Cowboy Bebop' (viernes, día 19), ambiciosa serie con André Nemec (colaborador de J. J. Abrams en 'Alias') como 'showrunner' y el talentoso Christopher L. Yost (que escribió el gran capítulo 'El prisionero' de 'The Mandalorian') entre sus guionistas. 

De forma inteligente pero, quizá, algo incauta, la plataforma quiso prepararnos para la serie incorporando el original a su catálogo hace poco menos de un mes. Ha habido tiempo para familiarizarse con el 'cowboy' cazarrecompensas Spike Spiegel y sus compañeros a bordo de la nave Bebop: el expolicía con brazo cibernético Jet Black, la ingeniosa fugitiva Faye Valentine, el 'perro de datos' Ein y la joven hacker Ed. Tiempo para disfrutar de sus misiones en busca de criminales por todo el espacio, de aventuras imposibles e impulsos cómicos combinados con una resonante melancolía: tras su fachada altanera, Spike esconde un corazón roto

En el reciente evento 'TUDUM', los títulos de crédito invitaron a la esperanza: la compañía Imaginary Forces ha creado una efectiva réplica de los originales. Por supuesto, esto incluye el uso del mítico tema 'Tank!', de Yōko Kanno, que ha sido repescada para la serie junto a su banda The Seatbelts. El primer episodio resulta bastante leal al original: recupera la trama de esos Bonnie y Clyde contrabandistas de la droga ojo sangriento y es un alarde de estilización manierista que calca imágenes clásicas. John ChoMustafa Sakir Daniella Pineda parecían dar el pego como, respectivamente, Spike, Jet y Faye.

'Arma letal' en el espacio

Una de las libertades que se permiten es introducir a Faye ya en este primer episodio, en lugar del tercero, como queriendo equilibrar la masculinidad reinante. En capítulos posteriores, a pesar de la introducción de situaciones y personajes reconocibles, la serie toma todavía más distancias respecto a su referente, no queda claro si por la dificultad de trasladar un 'anime' a imagen real o por el afán de hacer un producto estándar. Los 24 minutos de capítulo son ahora 42 y, con ello, se pierden ritmo y furia. El fatalismo romántico sigue ahí (de hecho, se da más protagonismo a la desaparecida Julia), pero gana el toma y daca cómico entre los tripulantes de la Bebop, sobre todo unos Spike y Jet convertidos en claros relevos espaciales de los Riggs y Murtaugh de 'Arma letal'. 

André Nemec explicaba así en 'Polygon' el influjo del original sobre la copia: "Mirábamos los escenarios, mirábamos el atrezo, mirábamos el vestuario, mirábamos el vestuario, mirábamos los montajes, hablábamos sobre todas estas cosas, pero no para imitar el anime, sino para empaparnos de su espíritu". Es decir, como el primer Cowboy Bebop, esto no es un 'cover' fidedigno sino una especie de remezcla. Como la mayoría de remezclas, por desgracia, no iguala al original. 

Este no será, sin embargo, el último intento de Netflix de hacer un anime de carne y hueso. Hace una semana se anunciaba el reparto de la futura serie 'One Piece': el mexicano Iñaki Godoy (Bruno en '¿Quién mató a Sara?') tendrá la difícil misión de hacernos olvidar al pirata Monkey D. Luffy de casi mil episodios y decena y media de películas de animación. 

Compartir el artículo

stats