Marta Riesco pasó de tenerlo casi todo a no tener casi nada. La reportera trabajaba en Telecinco y tenía una relación que muchos creían irrompible, pero todo fue truncándose. El detonante fue una rueda de prensa de José Ortega Cano donde la reportera, que trabajaba para el programa Fiesta que presenta Emma García en Telecinco, tuvo un encontronazo con la reportera de otro programa de la cadena.

La cosa no salió nada bien, hubo cruce de acusaciones y Marta Riesco llegó a pedir ayuda a los directivos de la cadena. También quiso tomarse la justicia por su mano y amenazó con hablar sobre algunas de las caras más conocidas de Telecinco. Finalmente, y tras una baja médica de unas semanas, la reportera volvió a su programa. Pero no le duró mucho, a la semana fue despedida.

Marta Riesco se refugió entonces en su novio, Antonio David, y explotó su trabajo como influencer. Pero las cosas malas nunca vienen solas, y hace unos días la pareja se rompió. La reportera culpó de su ruptura a Rocío Flores, hija de Antonio David y Rocío Carrasco. Y desde entonces, intentar retomar su vida, tanto sentimental como profesional.

Riesco sigue adelante con su vida y está aprovechando su nueva soltería saliendo de celebración, son su gente. Además, en uno de sus últimos posts deleitaba con su voz en un karaoke interpretando un conocido tema musical. La propia reportera confesaba horas después que "lo pasó genial".

Además, sigue día a día con sus publicaciones de Instagram y subiendo imágenes con diferentes looks que enamoran a sus fans y a la propia Riesco. Así lo ha confesado con un vestido azul del que ha confesado estar "enamorada".

Las publicaciones del corazón no han decepcionado y ha sido Lecturas la encargada de sacar a la luz que pasó en la noche de la ruptura de la pareja. Por lo visto, "Marta se había quedado sola en el entorno familiar de Antonio David. Hace un par de semanas discutió con Rocío Flores y no se hablaban desde entonces", relata el reportaje de Lecturas. "La reportera le reprochaba que él hacía su vida y salía mucho sin contar con ella y que ella tenía que quedarse en casa cuidando de sus hijos. La noche que rompieron, Marta se olvidó las llaves y él no apareció hasta las 3 de la mañana. Ahí todo estalló, la acusó de controlarle. Le espetó que estaba cansando de tantas peleas y de que siempre metiera en todo a sus hijos y le anunció que rompía la relación".