Marta Peñate y su novio, Tony Spina, se reencontraron en Honduras después de dos meses sin verse.

La concursante estuvo toda la edición acordándose de su novio y después de hacer un juego de recompensa con Anuar para conseguir un desayuno completo, el Pirata Morgan tenía una última sorpresa muy especial.

Después de implorar ante él, el tótem se abrió y la canaria comenzó a gritar al ver que se trataba de su novio Tony. Marta estaba tan emocionada que incluso intentó meterse en el tótem, en el que solo cabe una persona.

Finalmente, Tony salió y la concursante no dejó de abrazarle y de gritar: “¡Mi amor!”. El encuentro fue tan emocionante que estuvieron a punto de caerse en varias ocasiones. "Te amo", gritaba continuamente la canaria.

Después de preguntarle por toda su familia, Marta le advirtió su situación a su novio: “Llevo un montón de tiempo sola, me voy a quedar loquísima, eh”. Entre bromas y risas, Marta le preguntó por su olor: “¿Huelo mal?”. Tony le dijo que "olía a mar" aunque la canaria no dejó de insistir en que olía "fatal". “Hoy tenía un presentimiento y me he lavado por ti”, confesó la concursante.