La entrada de Torito en el plató de 'Viva la vida' se produce como si fuera un auténtico huracán. El colaborador, que actualmente tiene una sección de zapping en la que recopila vídeos añejos de la historia de Telecinco, a veces no puede contener su desbordante energía.

Y aunque el resto de colaboradores suelen ser proactivos en su espacio, en el que aparece disfrazado haciendo homenaje a algún personaje o efeméride, a veces salen mal parados, como le ocurrió a Carmen Borrego y a Alejandra Rubio.

En esta ocasión, metido en la piel de Rocío Jurado gracias al maquillador Alberto Dugarte, a Quique Jiménez no se le ocurrió mejor idea que coger en brazos y zarandear brutalmente a la hija menor y a la nieta de María Teresa Campos.

Carmen Borrego fue la primera "víctima" de Torito de la tarde. Tras el tremendo zarandeo, se quejó de que le había hecho daño: "¡Vete a la mierda! No creo que fuera necesario. Me has cogido por una costilla, me has apretado y me has hecho polvo. Que se me vea todo me da igual".

Acto seguido, fue a por Alejandra Rubio, que al ser más menuda, pudo agitarla con más fuerza, hasta el punto en que la levantó y quedó abierta de piernas, enseñando su ropa interior a todos los espectadores de manera involuntaria. 

"Otra que lo enseña todo", le decía Kiko Matamoros cuando volvió a pisar el suelo. Alejandra, que al escucharle, instintivamente puso sus manos sobre su zona íntima, salió entonces corriendo del set central del programa para conocer el alcance que había tenido la acción de Torito.

Tras unos minutos de preocupación por parte de Emma García, la hija de Terelu reapareció en plató con una sonrisa de oreja a oreja y quitándole hierro al asunto.