El último programa de ‘Pesadilla en la cocina’ tuvo como protagonista el restaurante A Cañada, ubicado en el barrio madrileño de Lavapiés. El local, con más de 125 años de trayectoria, aseguraba haber obtenido en varias ocasiones, incluso un cuarto premio a la mejor fabada del mundo.

Pero cuando Chicote probó la fabada vino la decepción. Al parecer, servían una fabada sacada de una lata de conservas. Ante las excusas de los trabajadores de la sidrería en cuanto a este tema y a otros de poca higiene en la cocina, el chef se enfadó. “¿Aquí todo el mundo miente?”, soltó.

Por si fuera poco, la cocinera del restaurante odiaba hacer cachopos (un típico asturiano), los camareros no se aclaraban con la sidra y Nati, la dueña del local, al borde de un ataque de nervios.