Esta playa, situada al sur de la isla, es un largo arenal de grano fino y blanco y aguas transparentes. Prolongación natural de es Dolç, está algo más alejada del núcleo urbano de la Colònia de Sant Jordi, y por tanto, las aglomeaciones son muy poco frecuentes.

El paisaje que la rodea es dunar, junto con altos pintos, que forman paere del Área Natural de Especial Interès del Cap de Ses Salines y pertenece a la finca de sa Vall.

El acceso es sencillo, aunque no se puede estacionar en la misma playa, sino que el visitante deberá aparcar en la Colònia para acceder a pie atravesando las playas de es Port y es Dolç.